Los Piratas resucitan con Chandler encendido y McCutchen imparable en duelo ante Nacionales
Pittsburgh rompe racha de siete derrotas gracias a una joya monticular de Bubba Chandler y una ofensiva oportuna en la octava entrada
WASHINGTON, D.C. – Cuando Bubba Chandler subió al montículo del Nationals Park el sábado por la noche, pocos esperaban que se cocinara una narrativa de redención deportiva. El joven lanzador de los Piratas de Pittsburgh transformó lo que habría sido otra noche sombría en una hazaña que revitalizó al equipo y levantó el ánimo en medio de una temporada tambaleante.
De catástrofe a casi-perfección: el renacer de Chandler
Chandler, quien celebró su cumpleaños número 23 al día siguiente, salió a su segundo juego como abridor con una misión clara: silenciar las dudas. En su debut como titular el pasado 7 de septiembre contra Milwaukee, fue vapuleado con nueve carreras en apenas 2⅔ entradas. Pero esa imagen habría de cambiar radicalmente contra los Washington Nationals.
Con la madurez de un veterano, Chandler lanzó seis entradas de oro permitiendo solo dos hits, una carrera y sin otorgar boletos. Además, ponchó a siete bateadores con tan solo 81 lanzamientos. Hasta el sexto episodio, el derecho mantenía un juego perfecto, el santo grial para cualquier lanzador de Grandes Ligas, que fue interrumpido por un sencillo de Dylan Crews.
“Estuvo intocable. Su curva entraba con un ángulo mortífero y la recta parecía invisibilizarse,” comentó Jared Triolo tras el partido.
Octava entrada: el despertar ofensivo que hizo clic
El juego había sido un duelo tenso, con los Nationals liderando 1-0 hasta la fatídica octava cuando se desató una tormenta ofensiva liderada por Andrew McCutchen y el prometedor Nick Yorke. Pittsburgh llenó las bases con dos boletos y un infield hit. McCutchen finalmente rompió el cero con un sencillo clave al jardín derecho-central, que volteó el marcador 2-1.
Después de una base por bolas a Oneil Cruz, Yorke conectó un batazo que rebotó en el guante del segunda base Luis García Jr. y se deslizó hasta el jardín derecho, permitiendo que anotasen dos carreras más y solidificaran la ventaja 4-1.
“Tienes que estar listo en momentos como ese. Sabíamos que la presión estaba sobre ellos también,” dijo Yorke tras el juego.
Triolo cierra con broche de oro
Para sellar la victoria, Jared Triolo conectó un solitario jonrón en la novena entrada, su batazo número 7 de la temporada, que no hizo más que festejar un partido catártico para el conjunto de Pittsburgh.
Victoria valiosa en contexto: fin a la racha de siete derrotas
Los Piratas rompieron una cadena de siete derrotas consecutivas, algo que tenía al equipo y fanáticos al borde de la frustración. Con esta victoria, mejoran temporalmente su confianza y, quizás, plantan las semillas para una recta final más competitiva en la temporada regular.
Además, el equipo acumula ahora nueve victorias en sus últimos once encuentros contra equipos de la División Este de la Liga Nacional, una estadística que comienza a revelar cierto patrón de dominio regional.
La labor del bullpen no pasó desapercibida
Carmen Mlodzinski (4-8) también tuvo una participación clave, lanzando dos entradas sin permitir carrera para adjudicarse la victoria. Su efectividad y temple en la loma tras la salida de Chandler fueron la otra mitad silenciosa de una fórmula ganadora.
Por otro lado, Cole Henry (1-2) cargó con la derrota tras otorgar dos boletos en el octavo episodio. El descontrol marcó la diferencia en un partido tan cerrado.
Un dato que no se puede ignorar
- Bubba Chandler se convirtió en el primer lanzador novato de los Piratas en lanzar seis entradas permitiendo menos de dos hits y sin boletos desde Gerrit Cole en 2013.
- McCutchen sumó su 35ª carrera impulsada de la temporada con su sencillo en la octava.
- Nick Yorke acumula ya 11 impulsadas en lo que va de mes.
¿Qué sigue para los Piratas?
Este domingo, los Piratas enviarán al montículo a Mike Burrows (2-4, 3.99 ERA), quien buscará aprovechar el impulso emocional del equipo. Por su parte, los Nationals le darán la bola al derecho Cade Cavalli (3-1, 4.67 ERA). Será clave ver si el equipo de Pittsburgh puede dar esa confiabilidad necesaria para pensar en un cierre de campaña respetable.
¿Latido de resurrección o ilusión momentánea?
A pesar de la posición complicada de los Piratas en la clasificación general, partidos como este avivan la esperanza de que piezas como Chandler, Yorke y McCutchen pueden funcionar como el nuevo esqueleto sobre el cual construir.
Si Chandler continúa mostrando aplomo y comandos como los del sábado, y si el cuerpo técnico logra maximizar su desarrollo sin acelerarlo, los Piratas podrían tener en sus manos a un abridor dominante para la próxima década.
Flores para McCutchen: El eterno líder
Con 38 años, Andrew McCutchen sigue escribiendo capítulos dorados con el equipo que lo vio nacer. Su temple con el bate, liderazgo en el clubhouse y claridad en momentos cruciales resultaron determinantes en el juego. La fanática “Yinzer” aún sueña con ver al MVP de 2013 llevar a un grupo joven de vuelta a los playoffs.
El béisbol como poema de redención
Al final, esto es lo que brinda el béisbol: narrativas humanas de errores convertidos en aprendizajes, derrotas que alimentan el alma y redenciones que laten en cada pitcheo. Chandler, los Piratas y su colectivo altibajo aún tienen mucho por escribir en esta temporada, pero lograron, aunque sea por una noche, conjurar un poco de magia y recordarnos por qué seguimos este deporte con tanta pasión.