Baker Mayfield y los Bucs se toman revancha en Houston con épica remontada

Un final diferente, en el mismo escenario

Dos años atrás, Tampa Bay Buccaneers sufrió una dolorosa derrota frente a los Houston Texans con un touchdown en los últimos seis segundos. Era un recuerdo amargo para sus jugadores, especialmente para Mike Evans, quien, oriundo de Galveston, sentía ese revés como propio. Esta vez, el destino les tenía preparada una revancha en el mismo lugar, pero con un desenlace distinto.

Este lunes por la noche, Baker Mayfield orquestó una impresionante serie ofensiva de 11 jugadas y 80 yardas que culminó en un touchdown terrestre de Rachaad White con apenas seis segundos en el reloj. Resultado: los Buccaneers vencieron 20-19 a los Texans, silenciando un NRG Stadium que esperaba repetir la euforia de 2023.

Mayfield, líder y salvador

El mariscal de campo Baker Mayfield lanzó para 215 yardas y dos pases de touchdown en una noche de emociones divididas. Su jugada más destacada ocurrió en la crucial cuarta oportunidad y 10 por avanzar en la serie final: una carrera de 15 yardas que mantuvo vivo el avance del equipo. “Eso catapultó todo desde ahí”, afirmó el entrenador Todd Bowles. “Fue un gran ejemplo de cómo ejecutar fútbol situacional”.

Mayfield repitió la hazaña lograda en la semana 1, cuando conectó con Emeka Egbuka para asegurar la victoria frente a Atlanta en los últimos instantes. De hecho, es apenas el segundo mariscal de Tampa Bay—junto a Doug Williams en 1980—en iniciar una temporada con dos game-winning drives consecutivos.

Un duelo de detalles

Más allá del resultado final, el juego fue dominado por la tensión, los errores y las oportunidades perdidas. Houston pudo sentenciar el partido, pero desperdició una primera y gol en la yarda 8 al no poder avanzar y tener que resignarse. Justo antes, el pateador de Tampa Bay, Chase McLaughlin, había fallado un gol de campo de 38 yardas, lo que encendió la esperanza local.

Pero entre aciertos y fallos, el clutch lo tuvo Tampa Bay.

El resurgir de una ofensiva terrestre clave

Los Buccaneers demostraron que no todo es aire. Por tierra, acumularon 169 yardas frente a apenas 84 de los Texans. Bucky Irving lideró el ataque con 71 yardas, seguido de Rachaad White con 65 y el propio Mayfield, quien aportó 33 yardas, 31 en el cuarto periodo.

Este control terrestre fue vital para mantener posesión y abrir caminos cuando el reloj era enemigo.

Chubb debuta con chispa, pero aún no es suficiente

Para los Texans, el debut de Nick Chubb no pasó desapercibido. Tras siete temporadas con Cleveland, se estrenó en el marcador en un acarreo de 25 yardas, dejando claro que sigue siendo un arma temible. También aportó con un pase pantalla de 27 yardas que preparó el touchdown inicial.

A pesar de esos destellos, el equipo de DeMeco Ryans no logró ser constante. “Tuvimos múltiples oportunidades de ganar este juego y no hicimos las jugadas necesarias”, manifestó el entrenador. Una de esas chances fue una devolución de despeje de 53 yardas por parte del rookie Jaylin Noel, sin capitalizar en puntos.

Emeka Egbuka: la nueva joya

Mucho se habló de Emeka Egbuka durante el draft y no decepcionó en sus primeros partidos. El receptor novato ya acumula tres touchdowns en dos juegos, uniéndose así a un selecto grupo—solo seis jugadores desde la fusión de ligas en 1970 han logrado esto en sus dos primeros encuentros.

Egbuka se está consolidando como una pieza esencial para Mayfield, mostrando química y capacidad en momentos clave.

La defensa, una moneda al aire

Ambas defensivas tuvieron momentos destacados y otros para el olvido. En el lado texano, Danielle Hunter brilló con dos capturas y un balón suelto forzado, alcanzando 101.5 capturas en su carrera.

Por parte de Tampa, Jakob Johnson bloqueó un despeje fundamental en el último cuarto, recuperado por los Texans pero sin mayores consecuencias gracias a una defensa que resistió.

Un nuevo rumbo para Tampa Bay

Con esta victoria, los Bucs se colocan con un registro de 2-0, sumando moral y validando el liderazgo de Mayfield en su segunda temporada con el equipo. No es solo el resultado, es cómo lo hacen: dos triunfos agónicos en los segundos finales, en escenarios complicados y con alta presión.

“Todo el equipo se mantuvo sereno”, comentó Mike Evans. “Nos preparamos para situaciones de dos minutos casi todos los días. Hoy, esa preparación rindió frutos”.

El próximo domingo recibirán a los New York Jets. Un nuevo reto que los encontrará con la confianza por las nubes.

Houston: corregir rápido antes de la semana 3

Para los Texans (0-2), las alarmas no están encendidas, pero el margen de error se acorta. Su ofensiva mostró chispazos con Stroud, Collins y Chubb, pero fue incapaz de sostener ritmo en la segunda mitad. Las decisiones arriesgadas, como ir por dos con la delantera mínima, son doble filo cuando no se concretan.

La buena noticia: el talento joven está ahí. Chubb, Stroud, Dell y Noel tienen chispa. Ahora, toca convertir esa energía en victorias.

Lesiones a considerar

• OT Luke Goedeke (Tampa Bay) salió con una lesión en el pie.
• DE Calijah Kancey (Tampa Bay) dejó el campo por un problema en el pectoral.

Datos curiosos y estadísticas

• Khalil Mack (Chargers), fue baja en otro partido por una lesión en el codo, importante para la semana NFL.
• Tampa superó por 85 yardas terrestres a su rival. Control del juego clásico.
• Mayfield y Doug Williams son los únicos mariscales de los Bucs con dos game-winning drives en las primeras dos semanas desde 1980.
• Texans desperdiciaron una primera y gol sin lograr puntos, en un partido que perdieron por un punto.

Resumen en cifras

¿Sorpresa de temporada?

Apenas van dos semanas, pero los Bucs proyectan convertirse en una de las sorpresas del año. Con un Mayfield maduro y una fórmula balanceada entre pase y carrera, el equipo tiene los elementos para pelear en una NFC abierta. Y como han demostrado: saben cómo cerrar partidos cuando el tiempo apremia.