Caos, lesiones y decisiones cuestionables: ¿Qué está pasando con tres franquicias clave de la NFL?

Entre la preocupante lesión de Joe Burrow, el desastroso inicio de temporada de los Bears y las decisiones polémicas en los Colts, la NFL nos regala drama y análisis táctico por igual

La semana 2 de la NFL dejó una estela de preguntas urgentes, decisiones bajo la lupa y un parte médico que hará temblar a más de un aficionado. En este artículo, exploramos tres historias relevantes que se desarrollan entre bastidores en tres franquicias diferentes: los Cincinnati Bengals, los Chicago Bears y los Indianapolis Colts.

Joe Burrow y el dolor de la lesión más subestimada de la NFL

Se llama turf toe y aunque suena como una broma de vestuario, es una lesión temida por los atletas de élite. El mariscal de campo estrella de los Bengals, Joe Burrow, se convirtió en la víctima más reciente de esta dolorosa afección que lo dejará fuera del emparrillado como mínimo por tres meses.

El diagnóstico: una esguince en la articulación metatarsofalángica, provocada por una hiperextensión del dedo gordo. La Academia Estadounidense de Cirujanos Ortopédicos explica que esta lesión ocurre cuando el pie se flexiona en exceso, lo que desgasta o rompe los ligamentos de la base del dedo.

¿Por qué es tan grave? En pocas palabras, hace imposible que un atleta profesional pueda empujar el pie, cortar al correr o tener estabilidad. El dolor es constante, la inflamación casi inmediata, y si es de grado III, como se sospecha que es el caso de Burrow, puede llevar a cirugía y una larga recuperación.

  • Grado I: Esguince leve. Requiere una semana de descanso.
  • Grado II: Desgarro parcial. Puede tomar varias semanas.
  • Grado III: Desgarro completo. Generalmente con dislocación y requiere cirugía.

"No sé cómo luce una rehabilitación de dedo", confesó el head coach de Cincinnati, Zac Taylor, con un dejo de resignación. Pero si hay algo claro, es que Burrow lo pondrá todo para regresar.

Bears: una tormenta perfecta en Chicago

El regreso de Ben Johnson a Detroit ha resultado un verdadero desastre. Luego de un prometedor inicio, los Chicago Bears (0-2) han mostrado la peor versión de sí mismos.

Derrota 52-21 ante los Lions, una defensiva que permitió más de 500 yardas y una ofensiva que comenzó encendida para luego desaparecer. El mariscal de campo Caleb Williams inició el partido con un 9 de 11 y un touchdown, pero terminó abrumado: fue capturado cuatro veces y no logró mantener el ritmo.

Los datos son alarmantes:

  • 73 puntos permitidos en cinco cuartos.
  • 20 castigos por 177 yardas en dos partidos.
  • 52 puntos recibidos contra Detroit: el tercer peor registro en la historia de la franquicia.

Y si eso fuera poco, el equipo podría quedarse sin sus piezas clave en defensa: Jaylon Johnson (ingle) y T.J. Edwards (isquiotibiales).

El único destello provino del receptor Rome Odunze, quien sumó 128 yardas y 2 touchdowns. Está empatado en el liderato de la liga con 3 anotaciones aéreas.

¿Hay esperanza en el horizonte?

Los Bears enfrentarán a los Cowboys de Matt Eberflus —sí, el ex coach despedido la temporada pasada. El morbo está servido y el margen de error es mínimo.

Colts: una victoria con sabor a incógnita

Los Indianapolis Colts están invictos (2-0), pero el camino recorrido ha estado lejos de ser claro. Su victoria 29-28 ante los Denver Broncos tuvo un protagonista: el pateador Spencer Shrader, quien necesitó dos intentos para ganar el partido después de que el primero (de 60 yardas) fuera fallado, y el segundo (de 45) concedido tras una penalización.

No obstante, la gran polémica provino del coach Shane Steichen, quien llamó tres acarreos seguidos con Jonathan Taylor en la zona prohibida (final del partido con tiempos fuera disponibles).

“Debería haber sido más agresivo”, admitió al día siguiente. “Teníamos tres tiempos fuera, podíamos haber lanzado y acercado más el balón”.

Esto plantea una pregunta lógica: ¿por qué arriesgarse a un intento desde 60 yardas, cuando la historia de la franquicia muestra que el más largo fue de 58?

Razones por las que este error pudo costarles el partido:

  • Shrader nunca había intentado un gol de campo tan largo (su récord era de 48).
  • Quedaban tiempos fuera.
  • Denver no tenía tiempos y un pase corto podía agotar el reloj igual.

A pesar de esto, los Colts han reflejado mejoras notables:

  • Jonathan Taylor: 165 yardas terrestres.
  • Tyler Warren: Novato estrella que suma 79 yardas y genera amenazas múltiples.
  • 11 series ofensivas consecutivas con puntos, incluyendo el cierre de 2024.

Problemas persistentes: la defensa secundaria está diezmada, con Jaylon Jones en reserva por lesión y dos titulares más en evaluación. También, les cuesta convertir en la zona roja: más goles de campo que touchdowns.

La próxima parada será en Tennessee, en un partido divisional clave. De lograr su tercera victoria, podría significar un nuevo panorama en la AFC Sur.

¿Qué nos dicen estas tres historias sobre la NFL?

No es solo un juego de fuerza o estrategia, la NFL también es narrativa. Las lesiones redefinen temporadas, las decisiones tácticas marcan carreras y los talentos, por brillantes que sean, sucumben ante sistemas mal diseñados o entornos inestables.

Joe Burrow necesitará cirugía y meses para volver a lanzar con confianza. En Chicago, un nuevo coach ya enfrenta el peso de la presión y críticas feroces. Y en Indianápolis, ganar no necesariamente equivale a convencer.

El fútbol americano, como la vida, se define tanto por cómo se reacciona al éxito como por la forma de gestionar la adversidad.

Y esto apenas comienza.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press