¿Puede sobrevivir San Francisco sin Brock Purdy? El reto de los 49ers en medio de las lesiones clave

La lesión del mariscal de campo y otras bajas ponen a prueba la profundidad y resiliencia de los 49ers en una temporada que promete drama desde temprano

Una baja clave en medio del buen inicio

La temporada 2025 de la NFL apenas comienza y ya los San Francisco 49ers enfrentan importantes obstáculos en el camino. El quarterback Brock Purdy está "altamente improbable" para iniciar el encuentro de este domingo frente a los Arizona Cardinals, debido a una lesión en el dedo del pie que ya lo dejó fuera la semana anterior. El entrenador Kyle Shanahan explicó que el mariscal podría ser designado como suplente o como el tercer QB de emergencia si no puede jugar.

Purdy, quien comenzó la temporada con fuerza tras recuperarse de una cirugía en el codo en 2022, ahora está lidiando con una dolencia similar al turf toe, lesión común entre jugadores que someten el dedo gordo del pie a esfuerzos extremos. Aunque no requiere intervención quirúrgica, sí lo ha limitado durante toda la semana. De hecho, solo participó de forma limitada en los entrenamientos.

Mac Jones toma la posta con paso firme

El encargado de liderar a San Francisco en ausencia de Purdy es Mac Jones, quien tuvo un debut prometedor como titular al lanzar para 279 yardas y tres touchdowns contra los New Orleans Saints la semana pasada. Jones, exmariscal de campo de los Patriots, parece haber encontrado en los 49ers una segunda oportunidad para revitalizar su carrera.

"Creo que Mac ha demostrado que puede mover la ofensiva con eficacia. Está tranquilo en el bolsillo y se comunica bien con sus receptores", dijo Shanahan luego del triunfo ante New Orleans. El dato no es menor, considerando que San Francisco tiene grandes aspiraciones esta temporada, luego de quedarse corto en la final de conferencia del año pasado.

Más problemas en la plantilla: lesiones que pesan

Pero Purdy no es el único afectado por lesiones. El equipo enfrenta otros problemas significativos:

  • El receptor Jauan Jennings está en duda por molestias en el tobillo y el hombro.
  • El liniero ofensivo Connor Colby se lesionó la ingle en la práctica del viernes.
  • Spencer Burford (tackle) y el novato Jordan Watkins están oficialmente descartados para el juego contra Arizona.

Son golpes que resienten la profundidad de la plantilla. Aunque el fullback Kyle Juszczyk y el defensivo Siran Neal ya han salido del protocolo de conmoción cerebral y están disponibles, perder a Burford y Watkins complica la protección del mariscal y la rotación de receptores.

Adrián Martínez al acecho

Si Purdy no está disponible completamente, San Francisco deberá promover al inexperto Adrian Martinez desde el equipo de prácticas. El egresado de Kansas State aún no ha debutado oficialmente en la NFL, lo cual convierte esta posible oportunidad en algo decisivo tanto para él como para el equipo. Aunque muchos lo consideran un dual-threat prometedor, apostar por él en plena temporada es una jugada de alto riesgo.

Un calendario que no da tregua

Después del duelo ante los Cardinals, los 49ers enfrentarán a equipos como los Dallas Cowboys, los siempre peligrosos Seattle Seahawks, y los Los Angeles Rams en las siguientes semanas. La ventana para mantener un arranque perfecto —actualmente 2-0— se cierra si no logran estabilizar el rendimiento ofensivo.

Las estadísticas respaldan la importancia de Purdy. Desde que asumió como titular en 2022, ha ganado 13 de los 15 juegos en los que comenzó, incluyendo series de playoffs. Tiene una tasa de conversión en tercera oportunidad del 48%, una de las mejores de la liga en ese lapso.

Precaución con el historial de lesiones

El historial médico de Purdy ya era una preocupación. En 2022 sufrió una grave lesión de codo durante la final de conferencia contra los Philadelphia Eagles, que requirió una cirugía reconstructiva (similar a la Tommy John en el béisbol). A pesar de recuperarse exitosamente, volvió en 2023 con la expectativa de mantenerse sano toda la temporada. Sin embargo, ya ha tenido que perder encuentros por lesión de hombro y ahora por el dedo del pie.

¿Estamos frente a un jugador frágil físicamente? No necesariamente. Muchos expertos argumentan que el estilo de juego de Purdy —movilidad constante, pases en rollout, y recepciones rápidas bajo presión— lo expone más al contacto físico y al desgaste corporal, especialmente en un sistema ofensivo tan dinámico como el de Shanahan.

¿Y qué hay de los Arizona Cardinals?

El rival que enfrentarán los 49ers, los Arizona Cardinals, llegan con su propia lista de dudas y lesiones. Entre ellos, el liniero ofensivo Paris Johnson Jr. y el ala cerrada Tip Reiman se encuentran en observación médica. Aunque los Cardinals han comenzado con un récord modesto, tienen elementos capaces de complicar a una defensa si se le da el espacio.

La defensa de San Francisco, liderada por Nick Bosa, ha sido clave este año, forzando entregas de balón y manteniendo a los rivales por debajo de los 20 puntos en promedio. Pero si no puede contar con una ofensiva fluida, podría desgastarse a lo largo del juego.

La encrucijada de Shanahan

En medio de estos retos, toda la atención se dirige a Kyle Shanahan, quien enfrenta una prueba táctica y emocional. ¿Debería forzar a Brock Purdy para que juegue en menos del 100%? ¿O confiar plenamente en Mac Jones mientras da más protagonismo al juego terrestre con Christian McCaffrey e incluso incorpora más jugadas de apoyo como pantallas y play actions?

La manera en la que maneje esta situación podría definir no solo lo que ocurra esta semana, sino también el ritmo y la salud del equipo de cara a la segunda mitad de la temporada. En palabras del propio Shanahan: "Tener profundidad es clave en esta liga. Pero también lo es tomar decisiones inteligentes con los que consideramos nuestros líderes en el campo".

Un ejemplo a seguir: Los Eagles de 2022

Un paralelismo interesante lo ofrece lo que hicieron los Philadelphia Eagles en 2022, cuando Jalen Hurts se lesionó en la Semana 15. Su reemplazo, Gardner Minshew, mantuvo a flote al equipo con un sistema simplificado centrado en evitar errores críticos. Aunque perdieron dos de los tres partidos que jugó, lograron asegurar la siembra #1 de la NFC, lo que les permitió descanso y preparación. Eso es lo que podría buscar replicar San Francisco en ausencia de su starter.

¿Es momento de encender las alarmas?

No todavía. San Francisco ha demostrado resiliencia antes, y cuenta con uno de los mejores cuerpos de entrenadores y plantillas defensivas de toda la liga. Como dice el receptor Deebo Samuel: “Este equipo no se rompe fácil. Sabemos adaptarnos. Así ganamos en 2022 cuando todos nos dieron por muertos tras la lesión de Jimmy (Garoppolo)”.

Sin embargo, el margen de error en la NFC es más reducido que en otras temporadas. Ganar divisionales temprano fortalece escenarios de desempate en postemporada. En otras palabras, cada partido cuenta. Y si algo ha enseñado la NFL moderna es que el momento lo es todo: lo importante no es cómo se empieza, sino cómo se llega a diciembre.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press