Joe Burrow fuera, Jake Browning al mando y la defensa de Bengals a prueba: ¿puede Cincinnati mantenerse competitivo?

Con la baja de su mariscal estrella, los Bengals enfrentan semanas críticas en la NFL mientras su defensiva busca su identidad y líderes emergentes intentan mantener la esperanza viva.

Joe Burrow volverá a perderse una parte significativa de la temporada y los Cincinnati Bengals entran en modo de supervivencia. Una vez más, el mariscal de campo franquicia de la organización está fuera por una lesión, y esta vez un turf toe en su pie izquierdo lo tiene en la lista de lesionados por al menos tres juegos, aunque se estima que podría estar fuera hasta por tres meses.

La noticia llega en un momento crucial: los Bengals comenzaron 2-0 por primera vez desde 2018 después de una ajustada victoria (31-27) ante los Jacksonville Jaguars. Pero el fútbol americano no es amable con las transiciones, y ahora le toca a Jake Browning tomar el timón. Más allá del área ofensiva, es la defensa quien también tendrá que mostrar su evolución si quieren seguir sumando victorias sin su mejor jugador.

La bomba: la nueva lesión de Joe Burrow

Joe Burrow, primer pick global en el Draft del 2020, ha tenido una carrera marcada por las lesiones. En apenas su sexta temporada, esta es ya su tercera lesión de gran magnitud. Tras lesionarse ante los Jaguars durante el segundo cuarto, fue operado del dedo gordo del pie izquierdo, una lesión comúnmente conocida como turf toe, bastante debilitante para los atletas que requieren máxima movilidad. El entrenador Zac Taylor confirmó que la cirugía fue satisfactoria, pero no se atrevió a dar un plazo para su regreso.

Burrow por sí solo transforma al ataque de los Bengals: ha lanzado para más de 14,000 yardas y 97 touchdowns en cinco campañas regulares. Su ausencia deja un vacío enorme, tanto en producción como en liderazgo. El año pasado ya jugó limitado, y esta campaña comenzaba como una de alta expectativa para una franquicia que ha construido un equipo altamente competitivo.

Jake Browning: ¿esperanza renovada o parche temporal?

Con Burrow fuera, Jake Browning asume el mando como titular. Browning, que nunca fue drafteado, ganó notoriedad como mariscal en la Universidad de Washington, pero ha estado en las sombras en la NFL desde 2019. Aunque su perfil técnico muestra disciplina y precisión en pases cortos, su experiencia en ligas mayores es limitada.

El próximo juego ante los Minnesota Vikings será una prueba esencial. Si bien el objetivo de alcanzar los playoffs aún es posible, perder a Burrow podría significar que todo depende de la actuación del suplente y la solidez del resto del plantel.

Defensa de Bengals: presiones, déficit en tercera oportunidad y el peso de la juventud

La defensa de Cincinnati ha sido una mezcla de luces y sombras. Contra Jacksonville, si bien se lograron dos intercepciones y se forzaron balones, también se permitió que los Jaguars convirtieran 6 de 13 terceras oportunidades, muchas por más de 10 yardas.

El coordinador defensivo, Al Golden, fue claro en su autocrítica: "Tengo que hacer un mejor trabajo en tercera oportunidad. Eso comienza y termina conmigo". Dijo también que hay que reestructurar el esquema defensivo para aprovechar mejor las habilidades de los jugadores. Esto es clave, ya que los Bengals terminaron la temporada pasada como la defensa número 29 en touchdowns aéreos permitidos.

El rol de las jóvenes promesas: entre oportunidades y lesiones

La defensa de Cincinnati se ha nutrido con talento joven y promete evolución. Jugadores como Dax Hill (CB) y Jordan Battle (S), quienes interceptaron a Trevor Lawrence en el último juego, son ejemplos de un nuevo núcleo defensivo que podría marcar época... si se consolidan.

Sin embargo, no todos los jóvenes están disponibles. El ala defensiva novato Shemar Stewart fue descartado por un esguince de tobillo. Stewart había mostrado un impacto positivo en la presión al mariscal rival en jugadas de tercera oportunidad. Su ausencia significa mayor responsabilidad para jugadores como Joseph Ossai y Myles Murphy.

El único bastión defensivo consolidado por el momento es Trey Hendrickson, quien suma ya múltiples presiones que han provocado dos pérdidas de balón para los rivales. Su inicio de temporada está al nivel de su selección All-Pro en años anteriores.

La narrativa de los turnovers: ¿estrategia o casualidad?

Una de las luces más brillantes en la defensa bengalí ha sido la capacidad de robar balones. En dos partidos forzaron cinco entregas, número que los coloca entre los tres mejores equipos en ese rubro hasta la semana 2.

El coach Taylor fue claro: “Hay una sensación real de que estas pérdidas van a venir en racimos porque nuestros muchachos se lo han ganado entrenando para encontrar el balón”. Y Dax Hill lo reafirma: "Solo tenemos que seguir elevando nuestro nivel, seguir creyendo en nosotros y cazar el balón".

Sin embargo, en la NFL moderna, vivir exclusivamente de los turnovers no es sostenible. Las ofensivas rivales pueden ajustar fácilmente. Por eso es vital que el esquema defensivo de Golden mejore en cobertura y densidad en el juego terrestre.

Panorama de calendario: ¿punto de quiebre?

El calendario tampoco da descanso a los Bengals. Después de enfrentar a Minnesota, tienen que medirse contra Baltimore (actual líder divisional), Seattle y una renovada escuadra de Cleveland. Cualquier tropiezo sin Burrow podría escalar y complicar el acceso a postemporada.

Está claro que Jake Browning no solo juega por mantener al equipo competitivo: juega por su permanencia en la NFL. Y la defensa, que aún tiene piezas por acoplarse, necesita evolucionar de inmediato para sostener los partidos mientras el ataque se adapta a la nueva realidad.

¿Pueden sostener el impulso?

Se puede sentir la urgencia detrás del vestuario de los Bengals. Hay talento, hay plantilla, pero también incertidumbre. La ofensiva se reestructura sobre la marcha, mientras que la defensa intenta afianzarse forjando una identidad en base a presión e intercepciones.

Queda claro que Zac Taylor no está permitiendo caer en pánico: su mensaje es consistencia, no desesperación. Browning no está solo; tiene un cuerpo receptor élite con Ja'Marr Chase, Tee Higgins y Tyler Boyd, además de Joe Mixon en el backfield. Pero para que este conjunto tenga éxito, necesita que la defensa deje de ser solo oportunista y se vuelva dominante.

La era sin Burrow ha comenzado, y los Bengals tienen dos caminos: revelarse como un equipo completo que puede aguantar el temporal o perder el rumbo sin su mariscal de campo estrella.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press