Devin Booker y los nuevos Suns: ¿un renacer o una ilusión más en Phoenix?

Con una plantilla renovada, dirección fresca y el liderazgo de su estrella, los Suns intentan redescubrir su camino hacia la gloria en la NBA

La promesa intacta de Devin Booker

En un panorama cada vez más cambiante dentro de la NBA, pocas figuras encarnan la lealtad y la resiliencia como Devin Booker. A sus 29 años y entrando en su undécima temporada con los Phoenix Suns, Booker no sólo es el máximo anotador en la historia de la franquicia, sino también el pilar emocional y competitivo del club.

Tras firmar una extensión de contrato de 145 millones de dólares por dos años, asegurando su presencia en el desierto hasta 2030, Booker dejó claro que su desafío con los Suns todavía no ha terminado: “Tengo asuntos pendientes aquí”, declaró ante los medios en el Media Day.

Desde su llegada en 2015 como la selección número 13 del draft, ha vivido de todo con Phoenix: temporadas desastrosas, la gloria efímera de las finales de 2021 y ahora, una reconstrucción con sabor joven.

Una reconstrucción agresiva y arriesgada

Los Suns pasaron del cielo al purgatorio en tan solo una temporada. Tras el fracasado experimento de reunir a tres All-Stars –Booker, Kevin Durant y Bradley Beal– que culminó con un récord de 36-46 en la 2024-25, el front office optó por una limpieza casi total.

  • Mike Budenholzer fue despedido tras una sola campaña como entrenador.
  • Kevin Durant, 15 veces All Star, fue enviado a Houston.
  • Bradley Beal fue comprado y ahora juega para los Clippers.

En su lugar llegó una camada joven encabezada por Jalen Green, Dillon Brooks, Mark Williams y el gigantesco prospecto de 19 años Khaman Maluach, quien mide 2.18 m. A ellos se suman rostros conocidos como Grayson Allen o Royce O’Neale. Todo bajo las órdenes de otro debutante: Jordan Ott, un técnico de 40 años que viene de una experiencia sólida como asistente en Cavaliers, Lakers y Hawks.

¿Liderazgo suficiente para aguantar la presión?

Uno de los grandes retos que afronta Booker esta temporada es pasar de ser la estrella anotadora a convertirse en una figura más integral como líder. “El aspecto del liderazgo será más importante que nunca este año”, afirmó el escolta.

No sólo se trata de inspirar en los momentos clave del partido, sino de ser mentor de jugadores como Maluach y Green, quienes pueden ser joyas en bruto, pero aún requieren maduración.

Jordan Ott expresó su admiración total: “¿Qué tan afortunado soy? Primer año como entrenador en jefe y tengo a un superestrella como Booker, alguien que ha demostrado su calidad en NBA y Juegos Olímpicos”.

Las nuevas piezas ¿pueden construir una nueva identidad?

El traspaso de Durant a Houston trajo consigo elementos intrigantes:

  • Jalen Green (22 años): Promedia 20.1 puntos por juego en cuatro temporadas. Gran capacidad atlética, pero criticado por su defensa y decisiones en cancha.
  • Dillon Brooks: Un polarizante “3 and D” que aporta defensa perimetral dura y un promedio aceptable de 14 puntos por partido con 40% en triples el año pasado.
  • Mark Williams: Un pívot tradicional que, pese a problemas de lesiones, mostró flashazos de brillantez en Charlotte. Puntos fuertes: rebotes, protección del aro y eficiencia en la pintura.
  • Khaman Maluach: Draft No. 10, es un “proyecto” defensivo con gran potencial físico. Comparado por algunos scouts con un joven Rudy Gobert.

Aunque hay talento, la apuesta de Phoenix es una mezcla inestable: juventud sin experiencia y un entrenador nuevo en proceso de adaptación.

Una franquicia en el ojo del huracán… también fuera de la cancha

No sólo dentro del campo Phoenix vive una tormenta. Mat Ishbia, el polémico dueño del equipo, ha enfrentado desde su llegada múltiples demandas por discriminación, despidos injustificados y represalias.

Destacados casos como el de Nikki Blue –exentrenadora del equipo femenino Phoenix Mercury– han encendido alertas sobre el ambiente laboral en la franquicia. Ishbia, sin embargo, ha adoptado una postura de confrontación:
“No pagamos si no hicimos nada mal. Que escriban lo que quieran. No hemos perdido una sola demanda y no vamos a perder ninguna”.

Este tipo de declaraciones pueden generar un ambiente tenso que afecte incluso al rendimiento de la plantilla joven.

Flashback: 2021, el año dorado que Phoenix desea replicar

Vale la pena recordar que Booker ya fue el eje de un proyecto exitoso. En 2021, junto a Chris Paul, lideró a Phoenix hasta las Finales, cayendo 4-2 ante los Milwaukee Bucks pero demostrando que con disciplina y buena química se puede competir con los mejores.

No lo conseguimos en 2021, pero entendí que es un proceso diario... y empieza ahora”, reflexionó Booker al iniciar el training camp.

Esa experiencia podría ser vital para transmitirle a sus nuevos compañeros que el éxito no es inmediato, pero sí alcanzable.

Un equipo que podría sorprender… o desintegrarse rápido

Las predicciones con los nuevos Suns son dispares:

  • Los optimistas creen que el núcleo joven ganará rápidamente cohesión con Booker como pegamento y Ott innovando desde el banquillo.
  • Los escépticos hablan de un proceso de reconstrucción de al menos 2-3 años. Demasiadas incógnitas, desde las lesiones de Mark Williams hasta el carácter inflamable de Brooks.

Las casas de apuestas colocan a los Suns a mitad de tabla en el Oeste, con una cuota de +3500 para ganar el campeonato (FanDuel, junio 2025), muy lejos del favoritismo de equipos como Denver, Boston o Milwaukee.

El legado de Booker en Phoenix: mucho más que puntos

Booker ya tiene asegurado su lugar en la historia de los Suns. Ha superado leyendas como Walter Davis, Amar’e Stoudemire y Steve Nash en puntos y es una de las caras más reconocidas de la NBA actual, con participaciones destacadas en el Team USA y múltiples Juegos de las Estrellas.

Pero su legado completo dependerá de si puede ser el arquitecto de una segunda era dorada en Phoenix. Transformar una plantilla inexperta en un contendiente será una misión hercúlea, pero también la mayor muestra de grandeza.

Este es mi equipo”, dijo Booker. Y Phoenix lo espera como su nuevo Moisés, guiando al equipo a través del desierto. Literal y figurativamente.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press