Tennessee Titans en crisis: ¿Reconstrucción en marcha o desastre prolongado?

Con diez derrotas consecutivas y una ofensiva inexistente, los Titans enfrentan su peor crisis desde que llegaron a Tennessee en 1997

Un comienzo que nadie imaginó

Los Tennessee Titans atraviesan el peor momento de su historia reciente. Tras ser blanqueados 26-0 por los Houston Texans, el equipo no solo cayó a un 0-4 en esta temporada 2025, sino que extendió su racha negativa a diez derrotas consecutivas. Es una debacle que data desde la temporada pasada y que amenaza con colocar al equipo en los libros de los peores registros de la NFL.

Jeffery Simmons, el estelar tackle defensivo de Tennessee y uno de los capitanes del equipo, fue tajante luego de la más reciente derrota: “Hablamos mucho, pero no jugamos bien. Estoy cansado de decir que tenemos que jugar mejor: simplemente no lo estamos haciendo”.

Estadísticas que duelen

Los números explican el colapso.

  • 3.66 yardas por jugada: Tercera peor marca en las primeras cuatro semanas de las últimas 20 temporadas.
  • 3 touchdowns ofensivos en 4 juegos: Peor marca de la liga, igualada solo por Cleveland y Houston.
  • 5 pérdidas de balón: Más pérdidas que anotaciones.
  • Promedio de 175 yardas totales por partido: Inaceptable en la NFL moderna.

La ofensiva dirigida por el novato Cam Ward no ha sido capaz de engancharse en ningún partido. Contra Houston realizó apenas 10 completos de 26 intentos, sumando 108 yardas, una intercepción y un rating de pasador de 35.4. Una actuación que mostró que el salto del college football a la NFL aún pesa en sus hombros.

Un entrenador en la cuerda floja

Brian Callahan, quien asumió como head coach este año tras su paso por los Bengals como coordinador ofensivo, tiene ahora un récord de 3-18 como entrenador en jefe. Ese número lo deja a solo dos derrotas de igualar el negativo récord de Ken Whisenhunt, despedido en 2015 tras tener marca de 3-20.

Callahan reconoce la gravedad de la situación: “He estado aquí antes”, dijo, recordando su paso por el staff de los Bengals de 2019 que iniciaron 0-11. “Ese equipo luego eligió a Joe Burrow y giró completamente. Eso me mantiene motivado. Creo en el proceso”.

¿Qué está funcionando? La defensa… más o menos

A pesar de la humillante derrota, la defensa logró mantener el marcador 6-0 durante tres cuartos, a pesar de no tener ayuda del ataque.

Jeffery Simmons sigue siendo un referente. Contra Houston, registró una captura y cuatro presiones al mariscal C.J. Stroud. Su sack ocurrió solo 2.09 segundos después del snap. Según NextGenStats, esa es la captura más rápida de un tackle defensivo en las últimas dos temporadas.

Lo que falla: una ofensiva sin alma

Aquí radica el verdadero problema. La ofensiva es un naufragio.

  • Contra Houston, Tennessee fue blanqueado por primera vez desde 2019.
  • Es la séptima vez desde su mudanza a Tennessee en 1997 que son dejados en cero.
  • En dos partidos esta temporada, no han superado las 200 yardas totales.

El kicker Joey Slye también ha caído en desgracia. Empezó la campaña con 10 goles de campo exitosos, pero ha fallado sus últimos cuatro. Dos de esos fallos ocurrieron frente a Houston, incluyendo intentos desde 41 y 43 yardas que hubieran empatado el juego en su momento.

Lesiones que agravan el panorama

Las malas noticias continúan con un hospital lleno:

  • JC Latham, el tackle derecho, ha estado fuera por tres partidos debido a una distensión de cadera. Se espera su regreso pronto.
  • Tyjae Spears, prometedor corredor novato, se recupera de un esguince alto de tobillo. Ya ha comenzado su proceso para salir de la reserva de lesionados.

El camino no mejora

Como si todo esto fuera poco, los Titans enfrentan un duro calendario.

Ahora deben visitar a los Arizona Cardinals y después a los Las Vegas Raiders. Ambos equipos tienen sus propios problemas, pero son, en el papel, rivales que podrían complicar aún más la vida de Tennessee.

¿Se avecina un cambio radical?

Si la temporada continúa cuesta abajo, Tennessee podría estar trabajando para reconstruirse desde cero.

En 2019, los Bengals empezaron 0-11, terminaron 2-14 y eso les permitió elegir a Joe Burrow con la primera selección global del 2020. Ese movimiento cambió la historia reciente de la franquicia.

¿Podrían los Titans buscar algo similar?

En el horizonte del próximo Draft aparecen mariscales prometedores: Shedeur Sanders (Colorado), Drake Maye (North Carolina) y Quinn Ewers (Texas). Si Tennessee asegura una de las primeras selecciones, reconstruir con un mariscal franquicia no es imposible.

¿Y Cam Ward?

La presión sobre el joven mariscal crecerá conforme avancen las semanas. Aunque es un novato, su tiempo en la cancha evidencia que puede estar sobrepasado por la velocidad defensiva de la NFL. Queda la duda si el plan a mediano plazo de los Titans incluye desarrollarlo, o si simplemente es parte de una transición hasta una próxima gran apuesta.

Un leve rayo de esperanza

A pesar de todo, no está todo perdido. La defensa aún juega con intensidad. Simmons parece motivado y algunos jóvenes como Tyjae Spears y Treylon Burks (cuando están sanos) tienen talento para ser parte del futuro.

Pero este equipo necesita mucho más para competir, no digamos en los playoffs, sino en cada domingo.

Las próximas semanas serán claves. Cada juego puede decidir el futuro de Callahan, de Cam Ward y de la hoja de ruta de una franquicia que ya vivió una época dorada con Steve McNair y Eddie George, pero que hoy ve esos días como un recuerdo lejano.

Si logran una victoria, puede ser el primer paso hacia una reconstrucción controlada. Si no lo hacen pronto… otra tormenta se avecina.

“Este equipo tenía identidad. Ahora no sabemos ni quiénes somos”, confesó un veterano del vestuario bajo anonimato.

La verdad es que hoy los Titans no son contendientes, ni siquiera un equipo respetable. Es hora de decidir si van a competir… o destruir para volver a construir.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press