Texans en alza, Ravens en picada: ¿Cambio de jerarquía en la AFC?

Con una defensa dominante y un ataque que comienza a engranar, Houston toma impulso mientras Baltimore tambalea entre lesiones e inconsistencia

Houston calla críticas con su primera blanqueada en años

Los Houston Texans lograron este domingo una hazaña histórica: blanquearon a un rival, los Tennessee Titans, por primera vez desde el 2010. La victoria 26-0 no solo fue un resultado contundente, sino también la tercera vez en la historia de la franquicia que dejan en cero a su oponente. Ni siquiera cuando J.J. Watt dominaba la línea defensiva se había conseguido semejante actuación.

La defensa tejana lució implacable: contuvieron a Tennessee a solo 175 yardas totales (octava menor cantidad en la historia del equipo) y dos conversiones en once intentos de tercer down. Incluso el estelar novato y primera selección global del draft, Cam Ward, tuvo una pesadilla al completar apenas 10 de 26 pases, sufrir una intercepción y terminar con un índice de pasador de apenas 35.4.

“Tener una blanqueada es extremadamente difícil en esta liga. Enorme crédito a la defensa”, declaró el entrenador DeMeco Ryans tras el encuentro.

Y es que aunque Ryans delegó la llamada de jugadas al coordinador defensivo Matt Burke por este juego, él continuó participando activamente. Según Ryans, el éxito se debió a disciplina, ejecución colectiva y presión constante.

Woody Marks y la esperanza en el ataque

Woody Marks, novato seleccionado en cuarta ronda, brilló como nunca. Acumuló 69 yardas por tierra, 50 por aire, un touchdown por tierra y otro por recepción. Esto lo convierte en el primer novato en la historia de los Texans en lograr al menos 100 yardas totales con touchdown terrestre y por aire en el mismo juego.

Ante la ausencia de Joe Mixon por lesión, Marks asumió el rol de líder del backfield junto con Nick Chubb, quien aportó 47 yardas. Ryans destacó que, gracias al juego terrestre, pudieron mantener ofensivas sostenidas, algo que no lograron en las semanas previas.

“Hemos estado predicando que no hay que hacer de más: solo cumplir el rol. Y eso pasó hoy”, recalcó Ryans.

Pero no todo es perfecto en Houston

El ataque sigue teniendo problemas para arrancar en el primer tiempo. En tres cuartos lograron solo dos goles de campo. No fue sino hasta el final del tercer cuarto que una jugada brillante del mariscal C.J. Stroud —un pase de 37 yardas a Nico Collins— destrabó el duelo y pavimentó el camino para el primer touchdown.

Stroud fue explícito: “A veces solo hace falta una jugada clave. A partir de ahí, todo encaja”.

La otra cara de la moneda: Baltimore al borde del abismo

Mientras Houston florece, los Baltimore Ravens se encuentran en caída libre. Perdieron 37-20 ante los Kansas City Chiefs, bajando su récord a 1-3, su peor inicio desde 2015. Más allá del mal resultado, lo realmente preocupante es el colapso físico del equipo.

El mariscal Lamar Jackson abandonó el juego en el tercer cuarto por una lesión en los isquiotibiales. A esto se suma la baja definitiva del liniero defensivo Nnamdi Madubuike, dos veces Pro Bowl, por una lesión en el cuello. A la lista se añaden múltiples nombres: Roquan Smith, Marlon Humphrey, Ronnie Stanley y Nate Wiggins, todos abandonaron con distintas dolencias.

El panorama es alarmante: 7 de los 12 jugadores mejor pagados del roster están lesionados, según OverTheCap.

“Sí, todos tienen lesiones. Pero hay que lidiar con ello. Quien lo maneje mejor, sobrevive”, declaró el entrenador John Harbaugh.

Un equipo roto, dentro y fuera del campo

En lo estratégico, Baltimore también falló. Los Chiefs anotaron en 7 de sus primeras 8 posesiones. Baltimore promedia solo 52.5 jugadas ofensivas por partido, contra 71.5 de sus oponentes. Claro indicio de una defensa permisiva y una ofensiva ineficaz.

Harbaugh fue inusualmente directo al criticar a su propio staff:

“Nuestro enfoque no fue bueno. No seguimos nuestro plan de juego. No estoy contento, y los coaches tampoco”.

Incluso estrellas como Derrick Henry están desaprovechados. Tuvo solo ocho acarreos ante Kansas, contrastando gravemente con las 169 yardas terrestres que logró en la semana uno.

Justicia Hill, uno de los pocos destellos

En medio del caos, el corredor Justice Hill fue de los pocos que brillaron en la derrota. Registró dos touchdowns, incluyendo una carrera de 71 yardas. Las manos seguras de Zay Flowers y Mark Andrews, con siete recepciones cada uno, ofrecieron luces de esperanza.

Houston vs. Baltimore: Historia dispareja, pero momento diferente

Ambos equipos se enfrentarán esta semana en un duelo que tiene un nuevo sabor. En los últimos dos años, los Texans no le han anotado un solo touchdown ofensivo a Baltimore. Pero las cosas hoy son muy diferentes.

  • Houston viene de su mejor juego en años, sólido en defensa y con signos positivos en ataque.
  • Baltimore llega diezmado, con dudas internas y una defensa que ya no asusta a nadie.

Mientras Houston parece finalmente encontrar una identidad ganadora, los Ravens luchan por sostener su temporada básica. Una victoria de los Texans no solo sería histórica, sino un claro mensaje: la jerarquía en la AFC está cambiando.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press