Un arranque de playoffs electrizante en la MLB: Ohtani, Crochet y Williams deslumbran desde la loma y el bate
Actuaciones históricas, poder ofensivo y drama en la primera jornada de series de comodines definen el tono de una postemporada apasionante
La furia de los bates angelinos: Ohtani y los Dodgers hacen historia
Cuando se habla de jugadores que redefinen el béisbol moderno, Shohei Ohtani siempre está en la conversación. El fenómeno japonés dio una nueva demostración de por qué es considerado el mejor jugador de la actualidad, al conectar dos jonrones en el triunfo contundente de los Los Angeles Dodgers sobre Cincinnati Reds 10-5 en el Juego 1 de la NL Wild Card Series.
El primer cuadrangular de Ohtani fue un misil que salió del bate a 117.7 mph, el batazo más veloz que ha pegado en su carrera ante una recta de 100.4 mph del talento joven de Cincinnati, Hunter Greene. Más tarde, el nipón repitió con un estacazo de 454 pies en la sexta entrada, sellando así una noche memorable ofensivamente a pesar de haberse ponchado tres veces.
Teoscar Hernández no se quedó atrás y también descargó dos jonrones, además de impulsar cinco carreras. Tommy Edman aportó con otro vuelacerca, completando así las cinco tablas de la noche, igualando el récord de más jonrones en un solo partido de postemporada para los Dodgers y asegurando que la ofensiva estuviera encendida desde el inicio del juego.
Blake Snell fue otra estrella de la jornada. El dos veces ganador del Cy Young lució dominante en la loma, ponchando a nueve y permitiendo solo un hit en seis entradas completas. Su actuación fue la más aguda desde su paso por los Padres en los playoffs de 2022.
El bullpen, sin embargo, trajo algo de incertidumbre al permitir tres carreras tras múltiples bases por bolas. A pesar de eso, los Dodgers resistieron y mantienen su ambición intacta de convertirse en los primeros campeones consecutivos de la MLB desde los Yankees de 1998-2000.
Crochet y los Red Sox: estilo retro en la loma y corazón de acero
La historia en Nueva York fue otra joya del día. En una era donde los abridores rara vez superan los 100 lanzamientos, Garrett Crochet lanzó 117, la mayor cantidad para un abridor en playoffs desde 2019. Lo hizo con una autoridad digna de los años dorados del montículo.
«Solo una llamada al bullpen: directamente a Chapman», comentó arrogante (y certero) el joven zurdo al manager Alex Cora antes del juego. Y así fue. 7 2/3 entradas de dominio total, 11 ponches y ninguna base por bolas. Crochet maniató a los Yankees, retirando a 17 bateadores consecutivos en un tramo impresionante y marcando el camino a una victoria 3-1 de Boston en Yankee Stadium.
El apoyo ofensivo no fue espectacular pero sí efectivo. Masataka Yoshida conectó un sencillo crucial de dos carreras tras una base por bolas de 11 lanzamientos de Ceddanne Rafaela. Luego, Alex Bregman remató con un doble en la novena para dar algo de tranquilidad a los Red Sox.
Crochet fue adquirido por Boston tras una temporada desastrosa en Chicago White Sox (récord de 121 derrotas, el peor desde 1900), y tras firmar un contrato de 170 millones por seis años en abril, ha demostrado su valor desde el primer día. En 2025 lideró la MLB en ponches (255) y fue el abridor más dominante en la Liga Americana.
«Lo llamamos 'la bestia'», dijo confiado Trevor Story. Y con razón.
Desde 2019, no se había visto un esfuerzo tan intenso desde la loma en Octoberball. Alex Bregman, con experiencia junto a Verlander y Gerrit Cole, aseguró que Crochet está al nivel: «Está en la misma conversación».
Ponches, calidad... y errores: el amargo destino de Gavin Williams
En Cleveland, Gavin Williams perdió un juego sin permitir carreras limpias, un acto de infortunio que no se veía en playoffs desde Stephen Strasburg en 2017. Su línea: 6+ innings, 5 hits, 8 ponches, una sola base por bolas. Todo apuntaba a una victoria para Guardians, pero dos errores defensivos fueron letales.
Primero, el jardinero Jonathan Rodríguez pifió una pelota en el primer inning, facilitando una carrera. Luego, en la séptima, Jhonkensy Noel falló en cubrir correctamente la primera base tras un tiro de Brayan Rocchio cuando Detroit buscaba avanzar a Riley Greene, quien posteriormente anotó la carrera que definiría el marcador 2-1 para los Tigers.
«No puedo pensar en eso. Pasó. A seguir lanzando», dijo Williams con calma estoica. Pero su caída duele, habiendo retirado 11 de los últimos 12 a los que se enfrentó, completando uno de sus mejores trabajos del año solo para terminar en la columna de derrotas.
Los errores mentales y la ansiedad pueden temblar incluso a la fanaticada: los 26,186 fanáticos presentes —una de las menores asistencias en historia de playoffs en Cleveland— vieron cómo, con hombre en tercera y sin outs en el noveno, los Guardians no lograron siquiera empatar. Un rolling de Kyle Manzardo directo a la lomita sepultó sus esperanzas cuando el cerrador Will Vest puso fuera a José Ramírez.
La historia seguirá en los próximos días, pero estas tres joyas —la fiesta ofensiva de Ohtani, el recital de Crochet y la tragedia de Williams— abren la puerta para una postemporada vibrante, en la que ya ningún juego parece seguir los viejos guiones.
Números que importan
- 117 — Cantidad de lanzamientos de Crochet, mayor marca desde 2019 en postemporada.
- 5 — Jonrones conectados por los Dodgers, igualando un récord de franquicia en juegos de playoff.
- 3 — Series donde el ganador del Juego 1 ha avanzado en todas las ocasiones anteriores desde el nuevo formato.
- 255 — Ponches de Crochet en la temporada regular, líder en MLB.
- 121 — Derrotas de White Sox en 2024, quienes dejaron ir a Crochet al comenzar su reconstrucción.
Esto apenas empieza. Octubre está de regreso, y con él, las emociones más intensas del béisbol profesional.