Carlos King: El Rey No Tan Secreto de la Televisión Real

Cómo este productor afroamericano redefinió la TV sin guion desde el sur de EE.UU. y se convirtió en un referente de representación, independencia y narrativa auténtica

El legado de Carlos King va mucho más allá del título

Carlos King ha sido bautizado como “el Rey de la realidad televisiva”. Sin embargo, detrás de este título están décadas de trabajo, una implacable visión creativa y una firme convicción en el poder de la narrativa negra desde el corazón de Estados Unidos. Su historia no solo es de éxito, sino también de perseverancia en un mundo donde el racismo, la homofobia y la falta de propiedad creativa son retos constantes.

Una nueva geografía de la televisión

Los nombres de ciudades como Huntsville (Alabama), Jackson (Mississippi), o Detroit rara vez aparecen en la televisión nacional como epicentros del entretenimiento. Pero Carlos King cambió eso. Con su franquicia "Love & Marriage" y su programa "Belle Collective", logró posicionar estos lugares en lo más alto de la audiencia televisiva estadounidense.

“No mucha gente, incluyéndome, había escuchado de Huntsville hasta que conocí a algunas personas con historias fascinantes,” afirma King. Y es que su capacidad para encontrar la riqueza narrativa en ciudades olvidadas lo ha llevado a construir uno de los emporios más potentes en la televisión sin guion.

Kingdom Reign y la hegemonía en OWN

Desde su empresa Kingdom Reign Entertainment, Carlos ha producido más del 60% del contenido original del canal OWN (Oprah Winfrey Network), siendo responsable de éxitos como "Love & Marriage: Huntsville", "Love & Marriage: Detroit" y "Family Empire: Houston".

Este dato es aún más impactante si consideramos que OWN es propiedad de Oprah Winfrey, una de las figuras más influyentes en los medios de comunicación globales. En palabras del propio King: “Oprah, Tina Perry y Drew Tappon entendieron mi visión desde el principio, y me brindaron las herramientas para plasmarla en la pantalla”.

¿El Andy Cohen negro?

Muchos lo han comparado con Andy Cohen, la cara en pantalla y productor detrás de la franquicia Real Housewives. Pero King prefiere marcar distancia: “Sí, ambos trabajamos en entretenimiento sin guion, pero quiero que la gente vea nuestra individualidad. Lo que hago está enraizado en las comunidades negras no representadas. Mi legado es mostrar eso al mundo”.

¿El resultado? Mientras Cohen ha sido la cara visible, King está emergiendo como la mente brillante detrás de la autenticidad, con programas que celebran la diversidad negra lejos de los estereotipos de las grandes ciudades.

El poder de contar historias reales

Carlos ha identificado tres claves imprescindibles para un reality interesante:

  1. El elenco: “Un show vive o muere por su elenco”. Las personas deben tener vidas interesantes y disposición para mostrarlas.
  2. El ángulo: “¿Qué lo hace diferente?” Por eso sus historias suceden en lugares inéditos.
  3. Autenticidad: “La audiencia detecta lo falso inmediatamente”.

Y también tiene claro lo que NO funciona:

  • Elencos que no quieren revelar su realidad.
  • Temas repetidos que ya “están al aire”.
  • La falsedad: lo peor que puede tener un reality.

Su enfoque ha generado audiencia fiel y constante para OWN, donde su show “Love & Marriage: Huntsville” ha sido el número uno durante varias temporadas consecutivas.

Un enfoque de producción con conciencia

King también se presenta como un estratega empresarial. Uno de sus temas clave es la propiedad creativa. En un entorno donde las productoras externas ceden sus ideas a los grandes canales, él busca retener sus derechos.

“Si yo tuve la idea, busqué el elenco, desarrollé la historia, entonces también quiero las ganancias,” afirma. Esta postura lo llevó a crear su exitoso podcast "Reality with the King", cuya independencia le permite hablar sin filtros.

En su rol como emprendedor, también aboga por crear riqueza generacional en la comunidad negra. Considera que poseer los derechos de sus proyectos es una herramienta clave para ello, y lo ejemplifica con su control total sobre su podcast, su canal de YouTube y sus acuerdos de distribución.

Rompiendo barreras con elegancia

Carlos ha enfrentado discriminación tanto por ser afroamericano como por ser homosexual. Sin embargo, ha sabido convertir esos retos en oportunidades para diferenciarse y aprender.

“No necesitaba hacer un escándalo para defenderme. Sabía cómo hablar de manera que ellos pudieran 'digerir'. Tomaba esas conversaciones y las transformaba en energía para el cambio”. Para King, enfrentar la adversidad con inteligencia emocional ha sido la clave para abrir y mantener espacios de poder.

Un nuevo mapa para la TV sin guion

Durante décadas, las grandes historias de la televisión estadounidense se contaban desde Nueva York, Los Ángeles o Chicago. Pero King cambió eso. Demostró que el sur, el medial, y otras ciudades “olvidadas” de EE.UU. son fuentes ricas de historias reales, humanas y conmovedoras.

“¿Por qué ir siempre a Los Ángeles si hay dramas, negocios, relaciones y sueños en ciudades como Jackson?”, pregunta retóricamente.

Gracias a su visión, produjo programas que no solo entretienen sino también dignifican. Mujeres de negocios en Mississippi, familias afroamericanas construyendo imperios en Houston, y parejas negras redefiniendo el matrimonio en Alabama. Todos estos personajes han encontrado una plataforma legítima en la televisión nacional gracias a Carlos King.

Expansión, comunidad y cultura

Fuera de cámara, su influencia crece con rapidez. Su podcast Reality with the King es uno de los más escuchados en el mundo de los realities. Ahí comenta programas actuales, entrevista a participantes y analiza los entresijos de la industria.

Asimismo, en su canal de YouTube comparte contenido adicional, entrevistas exclusivas y procesos creativos de sus programas. Todo enfocado en empoderar a creadores emergentes de comunidades negras e hispanas. El mensaje que transmite es claro: puedes crear, liderar y ser el dueño de tu relato.

Un modelo disruptivo de éxito

En una industria que aún lucha con la inclusión, la representación auténtica y la equidad en derechos, Carlos King ha fijado un nuevo estándar. No es solo un productor exitoso, es un ejemplo para creadores afrodescendientes, LGTBQ+ y mujeres que deseen tener el timón de sus historias en un mundo que sigue siendo desigual.

“No quiero construir para que luego me den las gracias. Quiero construir lo mío y que mi comunidad crezca conmigo”. Con estas palabras, King no solo desafía los moldes de Hollywood, sino que ofrece a futuras generaciones un faro de liderazgo desde la autenticidad, el trabajo duro y la inteligencia estratégica.

Carlos King es, sin duda, el rostro nuevo de una televisión que ya no vive en los estereotipos de siempre. Vive en todas partes. Como las mejores historias.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press