Aryna Sabalenka y el Dominio Imparable en el Wuhan Open: ¿Estamos ante una Nueva Reina del Tenis Femenino?
La campeona del US Open acumula 19 victorias consecutivas en Wuhan y consolida su estatus como una de las grandes potencias del tenis actual
Aryna Sabalenka está viviendo uno de los mejores momentos de su carrera. La tenista bielorrusa, actual campeona del US Open, continúa su racha imparable en el Wuhan Open con una impresionante seguidilla de 19 triunfos consecutivos en este torneo, tras vencer a la rusa Liudmila Samsonova con un sólido 6-3, 6-2. Con esta victoria, Sabalenka avanza a los cuartos de final del torneo WTA 1000, confirmando que Wuhan parece ser su jardín privado.
Wuhan: el feudo de Sabalenka
Esta no es una racha cualquiera. Sabalenka ha conquistado el título en Wuhan en 2018, 2019 y en 2024, y su rendimiento en esta edición de 2025 sugiere que un cuarto campeonato puede estar en camino. Wuhan no solo ha sido testigo de su evolución como jugadora, sino que también ha cimentado su reputación en el circuito.
"Me encanta jugar aquí. La atmósfera, la pista, la energía del público… todo me motiva", declaró la bielorrusa tras su último encuentro. Su dominio en Wuhan la ha convertido en una figura casi intocable durante los últimos torneos, donde ha desplegado un tenis agresivo, potente y mentalmente sólido.
¿Qué la hace imparable?
El estilo de juego de Sabalenka es directo y demoledor. Su servicio potente, combinado con golpes de fondo rápidos y profundos, la convierte en una oponente temida incluso por las mejores jugadoras del ranking. Además, ha mostrado una notable evolución emocional, un aspecto que solía ser su punto débil en años anteriores.
En Wuhan, Sabalenka ha encontrado el balance perfecto entre potencia e inteligencia táctica. En el partido contra Samsonova, aplicó una presión constante desde la línea de fondo, obligando a su rival a cometer errores no forzados. En números, dominó con un 83% de puntos ganados con su primer servicio y convirtió 3 de 4 puntos de quiebre, dejando claro por qué es la número uno del mundo.
Jessica Pegula y su resistencia inquebrantable
Otra jugadora que ha dejado huella en esta edición del Wuhan Open es la estadounidense Jessica Pegula. La sexta sembrada ha mostrado una capacidad de resiliencia impresionante, ganando su sexto partido consecutivo en tres sets tras derrotar a la rusa Ekaterina Alexandrova 7-5, 3-6, 6-3.
"Ni recuerdo la última vez que gané en dos sets. Pero estoy compitiendo fuerte y me he enfrentado a jugadoras realmente buenas", señaló entre risas la jugadora de Buffalo. Las condiciones bajo techo también añadieron un ingrediente extra en el enfrentamiento, forzando a ambas a adapatarse rápidamente a la superficie más rápida y a la ausencia de viento.
Pegula, de 29 años y considerada una de las jugadoras más consistentes del circuito, ha tenido una temporada fluctuante. Hace apenas una semana cayó en las semifinales del China Open ante la campeona Amanda Anisimova. Pero en Wuhan, ha demostrado que la calidad y el carácter están aún intactos.
El factor físico y mental en la élite femenina
El tenis femenino actual ha encontrado en jugadoras como Sabalenka y Pegula una nueva dinámica. Más allá del talento técnico, la clave pasa por la capacidad de sostener el nivel físico y emocional durante largas temporadas. Sabalenka ha conseguido manejar la presión mediática y los desafíos del calendario sin ceder en rendimiento. Pegula, por su parte, contagia con su determinación en partidos que parecen no tener fin.
La ex número uno del mundo Iga Swiatek y la ascendente Coco Gauff también están presentes en Wuhan, lo que indica que la segunda semana del torneo podría presentar enfrentamientos de alto voltaje. Gauff sigue madurando rápidamente y, aunque fue superada por Anisimova la semana anterior, sigue posicionándose como una amenaza seria en la gira asiática.
2025: ¿nuevo ciclo de dominancia femenina?
La temporada 2025 ha abierto la discusión sobre una nueva supremacía en el tenis femenino. Tras años de dominio cambiante entre jugadoras como Osaka, Barty, Halep y Swiatek, Sabalenka parece dispuesta a solidificar una dinastía. Sus títulos en Wuhan y en Grand Slams, junto con su actitud ganadora, la consolidan como referencia.
Además, el auge del tenis femenino asiático ha dado al calendario de torneos en la región un atractivo especial. El éxito del Wuhan Open, junto con eventos como Beijing, Tokyo y Seúl, está dando una plataforma ideal para que las mejores del mundo se luzcan ante una audiencia creciente y apasionada.
Sabalenka y las cifras que impresionan
- 3 títulos en Wuhan Open: 2018, 2019 y 2024.
- 19 victorias consecutivas en Wuhan (dato actualizado 2025).
- Top 1 del ranking WTA con sólida ventaja sobre Swiatek y Gauff.
- Campeona actual del US Open (2025).
Una rivalidad en el horizonte: Gauff, Swiatek, Pegula y Anisimova
Las siguientes semanas pueden definir una narrativa apasionante: la batalla entre la fuerza descomunal de Sabalenka contra la nueva camada de jugadoras técnicas y atléticas lideradas por Coco Gauff e Iga Swiatek. La estadounidense Amanda Anisimova, tras arrasar en el China Open, también entra a ese radar de contendientes a romper la hegemonía establecida.
El circuito femenino vive un momento de competencia real, donde las sorpresas están a la orden del día pero la calidad de juego se mantiene en niveles altísimos. Wuhan es solo una muestra de lo que el tenis femenino tiene para ofrecer.
¿Y qué viene ahora?
Sabalenka está en cuartos de final y aún quedan posibles choques electrizantes. Iga Swiatek y Coco Gauff cumplen con sus respectivos compromisos nocturnos, mientras Pegula espera próxima rival. Todo indica que la parte final del torneo recogerá lo mejor del tenis femenino actual: grandes nombres, trayectorias distintas y ambición sin límites.
Wuhan, en este 2025, se perfila como el termómetro ideal para medir quién llega en mejor forma al cierre de temporada. Con la WTA Finals a la vuelta de la esquina y el calendario en pleno apogeo, cada victoria cuenta. Y Sabalenka no tiene intenciones de soltar el trono.
Si el tenis femenino quería una reina, Wuhan quizá ya la coronó.