Así se despidió Marc Maron: un adiós emocional al podcast que cambió la radio digital

Barack Obama cierra el ciclo en el episodio final del icónico 'WTF With Marc Maron', el programa que convirtió el garaje de un comediante en un pilar del diálogo contemporáneo

WTF With Marc Maron no fue solo un podcast: fue un espacio cultural, emocional y generacional. El pasado lunes, tras 16 años de historias, confesiones y entrevistas íntimas, el programa llegó a su fin con un invitado de lujo: Barack Obama, quien ya había hecho historia con Maron en 2015 al convertirse en el primer presidente en participar en un podcast en activo y, ahora, volvió para cerrar el ciclo.

Una despedida con peso simbólico

¿Cómo te sientes con todo esto? La transición, dejar algo que ha definido tu vida y tu carrera?”, preguntó Obama a Maron al inicio de la entrevista final. Maron, con una mezcla de honestidad y temor, confesó: “Creo que estoy listo para el descanso, pero también da miedo. Mucha gente ha llegado a depender de mí durante estos 16 años”.

La metáfora era inevitable: Maron comparaba su función como podcaster con la presidencia. Obama, con complicidad, respondió entre risas: “Creo que es bastante similar”.

Un fenómeno cultural llamado “WTF”

Desde sus humildes inicios en 2009, grabado en el garaje de su casa al que llamaba The Cat Ranch, Marc Maron transformó su propio drama personal en un espacio de reflexión colectiva. El programa surgió tras un periodo difícil en su carrera como comediante, y al principio fue un experimento terapéutico que lo conectó con colegas del circuito de stand-up.

Lo que siguió fue extraordinario: más de 1.686 episodios, millones de oyentes, un desfile de celebridades y figuras influyentes como Robin Williams, Paul McCartney, Cate Blanchett, Mel Brooks y figuras políticas como Elizabeth Warren, Bernie Sanders y, por supuesto, Barack Obama.

Momentos memorables

Uno de los episodios definitorios fue, sin lugar a dudas, el de Obama en 2015. Grabado con un nivel de seguridad presidencial nunca antes visto en un podcast, el entonces mandatario habló sin filtros sobre raza, política, cultura y música. Ese episodio impulsó a WTF a los primeros lugares de audiencia global y demostró que los podcasts eran más que una moda: eran un nuevo canal de diálogo público.

Pero hubo muchos otros momentos que resonaron profundamente con la audiencia:

  • La desgarradora conversación con el comediante Louis C.K. sobre el arrepentimiento.
  • El episodio con Robin Williams, tan vulnerable como revelador, se convirtió en material de culto tras su muerte.
  • Sus propios soliloquios sobre relaciones fallidas, la muerte de sus gatos o su lucha contra las adicciones eran tan cercanos como cualquier entrevista de alto perfil.

¿Por qué terminó?

En junio de 2025, Maron y su socio de producción Brendan McDonald anunciaron que era hora de cerrar ciclo. No hubo controversias ni conflictos internos. Maron simplemente explicó: “Estoy cansado, y me siento completamente satisfecho con lo que hemos logrado”.

Muchos esperaban que el podcast se perpetuara como un archivo continuo de figuras culturales. Pero para Maron, parte esencial del show era que sus episodios fueran momentos humanos, no entrevistas de promoción.

El sello Maron: voz rugosa y corazón abierto

¿Qué hizo tan especial a “WTF”? Su capacidad para crear conversaciones de intimidad inusual. Maron no solo preguntaba: confesaba, se quebraba, se reía con el alma. Desde el inicio de cada episodio (“Lock the gates!”), hasta el segmento final donde solía preguntarle a sus invitados “Are we good?”, el viaje era emocional.

Su tono rustico, su vulnerabilidad, y su estilo desordenado pero honesto lo diferenciaron de los formatos tradicionales de entrevistas en medios. El podcast se convirtió en una especie de terapia pública. Muchos de sus oyentes afirman que escuchar a Maron fue acompañarse durante divorcios, muertes de seres queridos, duelos o simples tareas cotidianas.

Obama y el cierre perfecto

La conversación de ese último episodio fue menos una entrevista y más un acto simbólico de paso de página. “Todavía tienes algunos capítulos más”, le dijo Obama. “No te apresures a buscar lo siguiente. Tómate un momento. Disfruta lo que lograste”.

En tiempos de algoritmos, ruido digital y polarización, “WTF” fue una muestra de que escuchar también es un acto político. Obama destacó justamente eso: “Había una decencia central en ti y en las conversaciones que tenías. Creo que, por eso, tuviste una base de fans tan sólida. Creo que vamos a estar bien”.

El legado de un podcast pionero

“WTF With Marc Maron” fue una semilla que germinó en miles de otros formatos. Hoy los podcasts gozan de un público masivo, gracias, en parte, a lo que Maron y McDonald demostraron: se puede construir una comunidad desde el alma, con micrófono y sinceridad.

Según Edison Research, en 2024 más del 64% de los estadounidenses mayores de 12 años escucharon al menos un podcast mensual. En 2009, cuando Maron empezó, ese número era de apenas 9%.

Su influencia también se reflejó en la forma en que celebridades —incluso reacias a hablar de sus emociones— confiaban en su formato. En el episodio final, Maron no se dedicó a despedidas sentimentales. Eso ya lo había hecho en el penúltimo episodio, donde dijo a sus oyentes con emoción: “Estoy agradecido de haber sido parte de sus vidas. Hemos pasado por muchas cosas juntos. Muchas rupturas. Muerte. Gatos. El mundo”.

“Cat angels everywhere”

Como guiño a los detalles más íntimos que definieron el show —incluidos sus queridos gatos—, finalizó diciendo: “Cat angels everywhere” (ángeles gatunos en todas partes).

Y así, con una mezcla de gratitud e introspección, se cerró uno de los podcasts más importantes del siglo XXI. Un adiós sin estridencias, pero con resonancia prolongada. Maron no solo cambió el podcasting; dejó una huella en cómo nos hablamos, nos rompemos y, más importante todavía, cómo nos escuchamos.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press