Jake Moody: De la sombra al estrellato con un gol de campo decisivo para los Bears

Una lluvia de redención: la historia de Jake Moody

En una noche empapada por la lluvia en Landover, Maryland, Jake Moody, un pateador aparentemente olvidado por la NFL tras un comienzo incierto, se convirtió en el héroe inesperado. Su gol de campo de 38 yardas al final del partido le dio la victoria a los Chicago Bears sobre los Washington Commanders por un dramático 25-24. Sin embargo, más allá de los tres puntos, lo que realmente ganó Moody fue una segunda oportunidad, el reconocimiento de sus compañeros y una historia de redención que vale la pena contar.

De la cima al fondo... y de regreso

Seleccionado en la tercera ronda del Draft de 2023 por los San Francisco 49ers, Moody comenzó su carrera profesional con altas expectativas. Tan altos eran esos estándares que, tras fallar dos intentos de gol de campo en la Semana 1 de la temporada 2025, fue cortado del equipo. La NFL, conocida por su naturaleza despiadada, no perdona errores consecutivos en posiciones tan especializadas.

Pero el destino tenía otros planes. Una lesión del titular Cairo Santos abrió una rendija en la puerta de los Bears, quienes firmaron a Moody para su escuadra de prácticas. Nadie esperaba que se convirtiera en el protagonista de una remontada pocas semanas después.

Un debut inolvidable con los Bears

Moody no solo fue llamado para ocupar la titularidad, sino que fue el encargado de cobrar todos los puntos tras touchdowns y llevarse la responsabilidad de momentos clave durante el partido. Acertó goles de campo desde 47, 48 y 41 yardas, antes de tener un intento de 48 yardas bloqueado en el último cuarto. Para cualquier otro, ese error podría haber significado el fin del juego. Para Jake Moody, fue el combustible para redimirse.

Con tan solo tres minutos en el reloj y con Chicago perdiendo 24-22, el quarterback novato Caleb Williams dirigió una serie de nueve jugadas para posicionar el balón en la yarda 21 de Washington. Tiempo expirando. Embarcados en un intento desesperado. Todo quedó en manos del nuevo.

"Toda la semana entrenó como si fuera el titular. Sabíamos que tenía el talento. Lo único que necesitaba era una oportunidad... y vaya si la aprovechó", aseguró el entrenador en jefe, Ben Johnson, al final del partido.

Una ovación en el barro

Cuando el balón cruzó los postes, el campo mojado se convirtió en un escenario de celebración. Moody fue levantado por varios compañeros y llevado en hombros. Caleb Williams, líder del equipo, admitió que no sabía quién era cuando llegó: "No lo conocía. Pero ahora soy su fan número uno".

D’Andre Swift, quien tuvo una noche fenomenal con 175 yardas desde la línea de golpeo y un touchdown de 55 yardas, también lo buscó para felicitarlo: "Fue la primera vez que hablé con él. Creo que eso resume lo que ha sido esta semana: una sorpresa hermosa", dijo sonriendo.

Serie de errores que costaron caro a Washington

La derrota de los Commanders dolió particularmente por las oportunidades desperdiciadas. El equipo acumuló tres pérdidas de balón, igualando su total de toda la temporada hasta el momento. La más crítica: el fallo de comunicación en un handoff entre Jayden Daniels y el corredor Jacory "Bill" Croskey-Merritt, que permitió a los Bears iniciar la serie del gol de campo ganador. Un fallo mental en un momento clave.

"No voy a culpar a la lluvia ni al terreno. Fue concentración. Mi culpa", reconoció Daniels al cierre del partido.

Un respiro para los Bears, una inquietud para los Commanders

Con tres victorias consecutivas, los Bears pasan a 3-2 y se posicionan como contendientes serios bajo el comando del nuevo cuerpo técnico. Al otro lado, los Commanders (3-3) no logran establecer constancia, intercalando victorias y derrotas en lo que va de la temporada, y perdiendo una oportunidad crucial de superar a los Philadelphia Eagles en la NFC Este.

Su entrenador, Dan Quinn, fue contundente: "Con tres pérdidas de balón, no se pueden ganar partidos. Así de simple".

Una revancha un año después

El clímax emocional de la jornada no solo radica en el gol de campo, sino en el contexto de la historia. Hace 50 semanas, esos mismos Commanders vencieron a Chicago en la última jugada con un Hail Mary conocido localmente como “Hail Maryland”. Aquella derrota fue tan devastadora para los Bears que provocó el inicio de una racha de 10 partidos consecutivos sin ganar.

Hoy, el destino giró en sentido contrario.

Estadísticas que marcan la diferencia

• Jake Moody completó 4 de 5 intentos de gol de campo.
• D’Andre Swift: 108 yardas terrestres en 14 acarreos + 67 en recepciones.
• Caleb Williams: 17 pases completos en 29 intentos, 252 yardas totales, un pase y una anotación por tierra.
• Jayden Daniels (Commanders): 19 de 26, 211 yardas, 3 anotaciones, 1 intercepción.

Una segunda oportunidad que cambia vidas

En el ultra competitivo mundo de la NFL, segundas oportunidades no son frecuentes, y redimirse frente a millones de espectadores no tiene precio.

"Siempre creí en mí mismo", declaró Moody. Y esa fe personal, sumada a la confianza de un cuerpo técnico dispuesto a mirar más allá de los errores del pasado, fue suficiente para escribir un nuevo capítulo en una carrera que parecía destinada a desvanecerse.

Ahora los Chicago Bears tienen algo más que una racha victoriosa: tienen esperanza, impulso, y quizás, el pateador que tanto necesitaban.