Haji Wright y Cristian Roldan: las nuevas armas de Pochettino para el Mundial 2026

Con goles, liderazgo y una visión a futuro, Estados Unidos encuentra piezas clave en su camino hacia la Copa del Mundo

Un renacer estadounidense bajo la mirada de Pochettino

Con la cuenta regresiva al Mundial 2026 en marcha, la selección de Estados Unidos parece estar encontrando su ritmo. Y aunque hay nombres consolidados como Christian Pulisic o Weston McKennie, dos figuras han emergido como sorpresas: Haji Wright y Cristian Roldan. En un amistoso contra Australia disputado en Commerce City, Colorado, Wright anotó los dos goles con los que el equipo norteamericano logró su primera remontada desde que Mauricio Pochettino tomó las riendas como entrenador.

El partido no solo sirvió para evaluar el rendimiento colectivo del equipo, sino también para brindar oportunidades a futbolistas que intentan ganarse un lugar en el plantel que disputará la Copa del Mundo en casa. Y vaya si aprovecharon ese escaparate.

Haji Wright: el "9" que se rehúsa a ser convencional

Con 27 años, Haji Wright atraviesa uno de los mejores momentos de su carrera. Goleador del Coventry inglés con 8 tantos en lo que va de la Championship, ha demostrado que su olfato goleador también puede ser utilizable con su selección. Sus dos goles ante Australia fueron producto de inteligencia, colocación y visión, pero también de la libertad que le han otorgado tanto Pochettino como su entrenador en Coventry, Frank Lampard.

“Me están poniendo en posiciones para mostrar lo que puedo hacer. Me permiten ser expresivo en el campo. No estoy atado al rol típico del ‘9’, puedo moverme y fluir libremente”, declaró Wright tras el encuentro.

Hasta antes del amistoso, Wright no había anotado en partidos como titular con su selección. Sin embargo, ya acumulaba 11 tantos en 13 partidos para club y selección desde agosto. Estos números y su versatilidad lo colocan como una pieza valiosa en la posible ofensiva estadounidense del próximo Mundial.

Cristian Roldan: resiliencia, liderazgo y precisión

Si la historia de Wright se cimenta en su impulso goleador, la de Cristian Roldan se alcanza por medio de la resiliencia y consistencia. Con 30 años y más de 40 apariciones internacionales, Roldan volvió al equipo nacional tras un largo período de ausencia. Su regreso se consolidó en los últimos amistosos, aportando asistencias —como las que posibilitaron los goles de Wright— y mostrando nuevamente su capacidad de influir en el ritmo y el carácter del equipo.

El propio Pochettino se deshizo en elogios:

“Necesitamos jugadores con confianza, un poco de arrogancia, algo de picardía y mucha competitividad. Cristian es un ejemplo. Si uno quiere construir un jugador perfecto, él tiene un poco de todo”, afirmó el seleccionador.

Roldan ha tenido una presencia constante durante los últimos amistosos: jugó contra Japón, Ecuador y Australia. Sus actuaciones y su adaptabilidad en el medio campo lo han convertido en una opción seria para acompañar a jóvenes como Yunus Musah o Giovanni Reyna.

Pochettino, el arquitecto de una revolución

Desde su llegada en noviembre de 2024, Mauricio Pochettino ha intentado reconfigurar el ADN de la selección estadounidense. Según sus propias palabras, su objetivo no es solo clasificar y competir en el Mundial, sino crear una herencia duradera. Ya piensa en la generación que jugará en 2030, aunque su contrato no cubre ese ciclo.

“Es nuestra responsabilidad crear un legado. Una base de jugadores que respeten nuestros valores, nuestra cultura, y que lleguen al 2030 en una situación mejor a la que vivimos hoy”, comentó el técnico argentino.

Estas palabras reflejan un enfoque a largo plazo, centrado tanto en resultados inmediatos como en el desarrollo integral del grupo.

Un grupo que empieza a encajar

Tras un inicio titubeante con derrotas dolorosas como la sufrida ante Corea del Sur, Estados Unidos encadena una racha de tres partidos sin perder: victoria ante Japón, empate con Ecuador y triunfo frente a Australia. Aunque Pochettino sostiene que aún no está satisfecho (“Quiero ver a jugadores individuales rendir aún mejor”), los signos son prometedores.

Además de Wright y Roldan, hay varios nombres que suenan con fuerza para consolidarse en el plantel:

  • Matt Turner (Arsenal): el arquero titular busca afirmarse con autoridad en el puesto.
  • Sergiño Dest (PSV): el lateral ha demostrado progreso tras problemas de disciplina.
  • Tim Ream y Chris Richards: experiencia y potencia en la zaga central.
  • Pepi y Balogun: dos delanteros jóvenes con perspectivas emocionantes.

¿Y Christian Pulisic?

El actual líder ofensivo del equipo, Pulisic salió lesionado ante Australia con un problema aparentemente muscular. Aunque no se ha confirmado la gravedad, preocupa a menos de un año del Mundial. No obstante, su experiencia en torneos grandes como Qatar y su resurgir en el AC Milan lo mantienen como piedra angular.

Rumbo al Mundial en casa

El Mundial 2026, que se celebrará en Estados Unidos, México y Canadá, será un hito para la CONCACAF. Y para Estados Unidos, es la oportunidad de demostrar que su proyecto futbolístico ha madurado. Con jugadores consolidados en ligas europeas, entrenadores experimentados como Pochettino y jóvenes hambrientos, el equipo tiene más argumentos que en torneos anteriores.

La última actuación mundialista llegó hasta octavos de final en Catar 2022. Ahora, con un plantel más profundo y un estilo más definido, apuntan por lo menos a cuartos, con la meta ideal de superar su mejor marca histórica (cuartos de final en 2002).

La nueva sangre: ¿apuesta segura o ilusión pasajera?

Wright y Roldan representan dos caras de la misma moneda: la reinserción de jugadores subestimados. Mientras Wright fue criticado por su irregularidad en Europa antes de asentarse en Inglaterra, Roldan fue marginado por técnicos anteriores pese a su solidez en la MLS con Seattle Sounders.

Hoy, ambos están demostrando que los ciclos pueden cambiar, que el trabajo da frutos y que Estados Unidos tiene talento suficiente para tener profundidad real, un atributo esencial para avanzar en una Copa del Mundo que lo verá jugar frente a su afición.

El mensaje está claro: en el fútbol moderno, los segundas oportunidades pueden valer oro. Y si Wright y Roldan representan el futuro inmediato, la selección de las Barras y las Estrellas puede soñar alto para el 2026.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press