Janet Mills vs. Susan Collins: La Batalla por el Senado de Maine en la Era Trump
La gobernadora de Maine lanza su candidatura al Senado y reaviva la resistencia demócrata contra el legado de Donald Trump y la trayectoria centrista de Susan Collins
Una contienda electoral que va más allá de las fronteras de Maine
La política estadounidense se prepara para una de las contiendas más intensas en las elecciones de medio término de 2026: la entrada de Janet Mills, actual gobernadora demócrata de Maine, a la carrera por el Senado federal. El anuncio oficial de su candidatura ha resonado más allá del noreste del país, ya que representa mucho más que una simple disputa estatal. Es un símbolo claro del enfrentamiento entre dos visiones de nación —una progresista, liderada por Mills, y otra conservadora, representada por la veterana senadora republicana Susan Collins.
El histórico enfrentamiento con Trump que definió a Mills
La campaña de Janet Mills ha dejado claro desde el inicio cuál será el tono: confrontación directa con la agenda republicana legado de Donald Trump. Una de las piedras angulares de su narrativa electoral es su enfrentamiento cara a cara con el expresidente Trump en la Casa Blanca en febrero, cuando este presionó a gobernadores para implementar su orden ejecutiva que prohibía la participación de atletas trans en deportes escolares.
Durante ese tenso intercambio público, Trump le dijo a Mills: “Más vale que cumplas porque si no, no recibirás ni un centavo de fondos federales”. A lo que ella replicó: “Te veré en la corte.” Esa respuesta audaz se convirtió rápidamente en el lema no oficial de su campaña por el Senado.
Collins bajo fuego: ¿moderada o cómplice?
Durante décadas, Susan Collins ha sido considerada una de las senadoras más moderadas del Partido Republicano. Pero ese perfil centrista se ha visto erosionado por decisiones que los demócratas no han dejado de recordar, entre ellas:
- Su voto a favor del juez Brett Kavanaugh, nominado por Trump, quien posteriormente integró la mayoría que revocó el emblemático caso Roe vs. Wade.
- Su respaldo a Robert F. Kennedy Jr. como Secretario de Salud y Servicios Humanos, pese a su historial anti-vacunas y sus ataques a los CDC.
- Su voto conjunto a favor de recortes fiscales que, según los demócratas, afectaron directamente programas de nutrición infantil y asistencia médica.
"Este momento exige mucho más de lo que Susan Collins está ofreciendo", sentenció Mills en una entrevista, subrayando la urgencia de renovar el liderazgo de Maine en el Senado.
La historia de Maine como bastión de la defensa democrática
Janet Mills ha invocado con frecuencia los nombres de antiguos senadores de Maine para establecer una conexión con el pasado orgulloso del estado como faro de la integridad bipartidista. Mencionó a figuras como:
- Margaret Chase Smith: reconocida por su denuncia temprana del macartismo en los años 50.
- William Cohen y Olympia Snowe: conocidos por su disposición a cruzar líneas partidistas.
- George Mitchell: demócrata que jugó un papel clave en los Acuerdos de Paz de Irlanda del Norte.
"Todos ellos defendieron la democracia contra quienes la amenazaban. Collins, creo yo, ha dejado de formar parte de ese legado", afirmó Mills.
La lucha por los derechos transgénero y la salud pública
Uno de los ejes temáticos de la campaña de Mills es la defensa de los derechos de las personas trans y la consolidación de la infraestructura de salud pública. La gobernadora lideró una coalición de estados para impugnar la orden ejecutiva de Trump que excluía a atletas trans de competencias escolares.
La administración Trump incluso intentó suspender fondos federales destinados al programa estatal de nutrición infantil como represalia. Sin embargo, poco después, el gobierno federal retrocedió en su decisión. Esa victoria fue presentada por Mills como una prueba de que "la resistencia firme y legal funciona".
En contraste, Collins ha sido criticada por respaldar políticas y nominaciones que según sus detractores debilitan el sistema público de salud del país.
Propuesta 50 en California y el intento por equilibrar el poder en el Congreso
La candidatura de Mills no sucede en el vacío. El Partido Demócrata está estableciendo una estrategia integral para contrarrestar la influencia de Trump y el dominio republicano en el Congreso. En California, por ejemplo, Barack Obama apareció en un anuncio de 30 segundos pidiendo apoyo para la Propuesta 50, una iniciativa que modificaría los distritos electorales para permitir que hasta cinco escaños tradicionales del Partido Republicano pasen a manos demócratas.
"Los republicanos quieren robarse suficientes escaños para manipular las elecciones y ejercer poder sin control por dos años más", sostiene Obama en el comercial.
La conexión con la candidatura de Mills es evidente: ambos representan intentos coordinados para frenar lo que consideran una erosión institucional sistemática promovida por el trumpismo.
Mills vs. la presión republicana y la narrativa del poder excesivo
No todo está servido para los demócratas. El Comité Senatorial Republicano ya contraatacó con un video publicitario que critica a Mills por:
- Haberse opuesto a las deportaciones masivas.
- Desobedecer órdenes ejecutivas de la administración Trump.
El video concluye con un rotundo “No, gracias, Janet”, dejando clara la tensión a la que se va enfrentar la gobernadora durante su campaña.
Un escaño clave en un mapa difícil para los demócratas
Las elecciones de medio término de 2026 presentan un panorama complicado para los demócratas en el Senado. Necesitan al menos cuatro escaños netos adicionales para recuperar la mayoría, y muchas de las contiendas se darán en estados que Trump ganó con holgura. Maine, sin embargo, representa una excepción estratégica: una oportunidad de ganar terreno en un estado que Kamala Harris ganó en 2024.
Además, con el retiro obligatorio de Mills como gobernadora, su paso al Senado parece ahora una evolución lógica en su carrera política.
Un nuevo liderazgo progresista en disputa
Aunque Mills parte con ventaja en visibilidad y experiencia institucional, no será la única demócrata en la contienda primaria. Graham Platner, un ostricultor que ha viralizado su campaña en redes sociales y cuenta con el respaldo del senador Bernie Sanders, también ha levantado expectativas. Su presencia podría empujar el debate interno hacia temas más radicales y comprometidos con posturas progresistas duras.
Mills: vocación de servicio, no de ambición
Janet Mills ha dejado claro que su decisión no responde a intereses personales. “La idea de estar en D.C. para mí no tiene nada de divertido”, dijo en una entrevista. “Pero el momento lo exige.”
En tiempos en que la democracia estadounidense enfrenta presiones sin precedentes, su candidatura representa para muchos algo más profundo que una simple disputa electoral: la reafirmación de valores que se sienten amenazados.
En un contexto nacional donde las líneas partidistas se han endurecido, y donde cada voto puede significar la diferencia para decisiones históricas —desde la protección de derechos corporales hasta la protección de programas sociales— la senaduría por Maine se ha convertido en una pieza fundamental en el gran ajedrez político de Estados Unidos.