Joel Embiid vuelve al ruedo: ¿puede aún cargar con los 76ers o es hora de un nuevo rumbo?

El regreso del MVP tras ocho meses fuera plantea incógnitas sobre el presente y el futuro de Filadelfia

El esperado regreso de Joel Embiid

Finalmente, tras casi ocho meses de ausencia, el pívot estrella de los Philadelphia 76ers, Joel Embiid, volvió a pisar la duela en el partido de pretemporada contra los Minnesota Timberwolves. En tan solo siete segundos, lanzó un triple que no entró, pero el mensaje era claro: la estrella camerunesa había vuelto.

Embiid disputó dos breves segmentos en el juego: seis minutos en el primer cuarto y tres minutos en el segundo. No fue espectacular, pero tampoco era necesario. Después de una temporada plagada de lesiones y una operación en la rodilla izquierda en abril, lo importante era verlo caminar, saltar y competir sin molestias visibles.

Un historial de lesiones preocupante

La carrera de Embiid, aunque brillante, ha estado marcada por las lesiones. Desde su llegada a la NBA en 2014, ha lidiado con fracturas, dolencias en la espalda, lesiones en el tobillo, meniscos desgarrados y más. La 2023-24 fue particularmente frustrante: solo pudo disputar 19 partidos, promediando 23.8 puntos, 8.2 rebotes y 4.5 asistencias antes de ser descartado para la temporada tras múltiples problemas físicos, incluyendo un esguince en el pie izquierdo y una fractura en los senos nasales.

He tenido tantas lesiones”, comentó Embiid el mes pasado. “Lo único que siempre me he dicho es que no puedes rendirte”. Es la mentalidad de un guerrero, pero uno no puede evitar preguntarse: ¿hasta cuándo podrá resistir?

Los Sixers sin Embiid: una debacle anunciada

Mientras Embiid veía desde la banda, los Sixers colapsaron. Filadelfia terminó la temporada pasada con un récord desastroso de 24-58, fuera de playoffs, fuera de play-in, y con más desafíos que certezas. El equipo nunca encontró una identidad sin su eje central. Tyrese Maxey brilló por momentos, pero no fue suficiente. La figura de James Harden ya estaba más enfocada en Houston que en Pensilvania, y el técnico Nick Nurse —en su primer año con el equipo— nunca logró estabilizar el barco.

¿Es sostenible el proyecto EmBiid?

Con 30 años y un historial físico cada vez más problemático, es válido preguntar si el proyecto de los Sixers puede seguir girando en torno a Embiid. Es un jugador generacional, pero el baloncesto —más aún en la NBA moderna— exige regularidad. Su limitada disponibilidad ha sido una constante: en sus 8 temporadas completas, solo en una superó los 68 partidos.

Los datos de disponibilidad de Embiid son alarmantes:

  • 2020-21: 51 juegos
  • 2021-22: 68 juegos
  • 2022-23 (temporada de MVP): 66 juegos
  • 2023-24: 19 juegos

Si el techo de una temporada sana ronda los 60 partidos, ¿puede seguir siendo la piedra angular? ¿O deberían los Sixers considerar una reconstrucción parcial?

Nick Nurse y la estrategia del "plan"

Según las palabras del entrenador Nick Nurse, existe un “plan en marcha” para reintegrar a Embiid de manera progresiva después de la operación en la rodilla. Durante el campamento de entrenamiento, Embiid se mantuvo con trabajos ligeros y algunas prácticas sin contacto, buscando evitar una recaída.

Esto abre una nueva serie de interrogantes tácticas: ¿Cuál será el nuevo papel de Embiid? ¿Menor volumen ofensivo? ¿Menos minutos? ¿Más descanso programado? Con una plantilla en proceso de transición —y sin un segundo All-Star consolidado—, cualquier decisión impactará directamente en el techo competitivo del equipo.

El legado en juego

Embiid es sin dudas uno de los jugadores más dominantes de la última década. En 2022-23, lideró la liga en anotación con 33.1 puntos por juego y se alzó con el premio MVP, rompiendo el dominio de Nikola Jokić. Fue un galardón merecido, pero también uno plagado de tensiones derivadas de sus altibajos físicos y emocionales.

A diferencia de otras estrellas contemporáneas como Luka Dončić o Giannis Antetokounmpo, el legado de Embiid depende más que nunca de sus próximos dos años. ¿Podrá guiar a los Sixers a unas finales de conferencia —por fin— o será recordado como un gigante de temporada regular con postemporadas vacías?

¿Qué opciones tienen los Sixers si Embiid no resiste?

El mercado no perdona. Si Embiid no logra mantenerse sano o el equipo no mejora, la presión para explorar una reestructuración será inmensa. Algunos escenarios posibles incluyen:

  • Traspasar a Embiid a cambio de jóvenes promesas y selecciones de draft.
  • Buscar agresivamente una segunda estrella para descargarle responsabilidad, como lo intentaron sin éxito con Harden.
  • Construir en torno a Maxey, quien en su cuarta temporada mostró destellos de potencial como base titular.

El reloj está corriendo. Si la franquicia no da un giro positivo rápido, las opciones drásticas comenzarán a ganar tracción entre analistas y aficionados.

La resurrección posible (pero incierta)

En la NBA, la narrativa puede cambiar rápido. Hace un año, los Denver Nuggets eran considerados una promesa sin consolidar. Jokić y compañía despejaron todas las dudas ganando el campeonato con autoridad. Filadelfia podría, en teoría, recorrer un camino similar. Pero para eso, Embiid no solo tiene que estar sano: tiene que estar en su mejor versión. Y eso no lo hemos visto desde hace más de un año.

El regreso de Embiid en la pretemporada es alentador, pero también una advertencia de lo frágil que es el proyecto. Los Sixers vuelven a apostar todo a un jugador brillante, pero vulnerable. El margen de error es mínimo.

Como dijo el propio Joel: “No puedes rendirte”. Pero quizás, para algunos en Filadelfia, ha llegado el momento de preguntarse si insistir sobre una base tan inestable es valentía... o negación.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press