Victoria Beckham: Más allá de la Posh Spice, una diseñadora decidida a romper moldes

El nuevo documental en Netflix revela la lucha, reinvención y resiliencia de Victoria Beckham en el mundo de la moda, más allá de su pasado como Spice Girl

Una historia que merecía ser contada con su propia voz

Si hay alguien que ha enfrentado la dura batalla de demostrar que es más que una etiqueta, esa es Victoria Beckham. A punto de cumplir 52 años, la ex integrante de las Spice Girls ha logrado lo que muchas figuras públicas no consiguen: reinventar su imagen y consagrarse como una fuerza reconocida en el mundo de la moda de alto nivel. Su nuevo documental en Netflix, titulado simplemente “Victoria Beckham”, ofrece una mirada íntima –aunque controlada– de su vida, su carrera y su lucha por el respeto en una industria repleta de escepticismo hacia las celebridades que se aventuran como diseñadoras.

Del aula de teatro al Palacio de París

Beckham cuenta en el documental, producido por Studio 99 –la productora de su esposo David–, que fue relegada al fondo del escenario durante sus años en la escuela de teatro por ser considerada "demasiado pesada". Es una confesión impactante viniendo de una mujer que siempre fue percibida como el estereotipo de estilo y perfección. Pero en su relato no hay victimismo, sino una voluntad clara de mostrar cómo esos momentos forjaron su determinación.

El clímax emocional de la serie es sin duda la presentación de su colección en París en 2024, frente a 600 personas e incluso con una tormenta amenazando con arruinarlo todo. Fue allí donde consolidó su lugar como figura seria de la moda internacional. Anna Wintour, editora de Vogue y gigante del sector, aparece en el documental validando su autenticidad y talento.

Una marca ganada con sudor, errores y perseverancia

Victoria no oculta en su documental los errores empresariales que casi provocan el colapso de su firma. Revela con honestidad cómo, en un momento dado, se gastaron 70,000 libras en plantas de oficina y 15,000 más en regarlas. “Fue una lección de humildad”, comenta. Aprendió a reestructurar, a trabajar con inversionistas inteligentes y, sobre todo, a volverse estratégica. Su marca es hoy rentable y se sostiene como una firma independiente, algo notable en el entorno ultra competitivo actual.

Según datos presentados en el documental, la industria de la moda generó más de $1.5 billones de dólares en 2023, y menos del 2% de las marcas dirigidas por mujeres celebridades logran sobrevivir más de cinco años. Victoria Beckham lo ha hecho durante casi veinte, y ahora reporta beneficios. “Estoy orgullosa, porque he construido todo esto sin comprometer mi visión”, sostiene.

Del 'girl power' a la resiliencia emocional

Aunque el documental solo dedica breves pasajes a las Spice Girls, Victoria reconoce lo esencial que fue esa etapa. “Me dieron mi personalidad de vuelta”, dice, y recuerda con cariño cómo Geri Halliwell la animó a mostrar su sentido del humor. Pero también fue esa exposición la que alimentó décadas de prejuicios sobre su seriedad, su talento y su valía en el mundo empresarial.

“La gente me ha juzgado por cómo me veo. No me importa admitir que he sido malinterpretada durante años. Antes de las redes sociales, la narrativa la controlaban otros y yo siempre salía con cara seria en las fotos. Ahora puedo contar mi historia desde mi propia perspectiva”, explica. Beckham también aborda su lucha con la autoestima, provocada por el acoso escolar y la inseguridad en su juventud.

David Beckham: más que esposo, socio estratégico

Otro aspecto revelador del documental es el papel de David Beckham en el impulso inicial de su marca. Aunque Victoria era la económicamente dominante al momento de casarse en 1999 (ella compró su primera casa), David fue quien dio el paso decisivo para invertir en el desarrollo del sello Victoria Beckham e invertir recursos y credibilidad.

Ambos se apoyan mutuamente en sus proyectos, como se evidencia por la participación cruzada en ambos documentales: “Beckham” (centrado en David) y este. Esa dinámica colaborativa –donde la pareja se eleva mutuamente en lugar de competir– es uno de los sutiles mensajes feministas del documental.

Victoria empresaria: moda y belleza bajo el mismo techo

Hoy en día, Victoria Beckham no solo triunfa en la moda femenina de lujo, sino también en el sector beauty. Su línea de productos de maquillaje y cuidado facial se ha consolidado con buenos números. “Mi objetivo ahora es construir una casa de moda y belleza integral, algo que soñé durante muchos años.”

Los datos financieros lo respaldan: su línea cosmética registró un crecimiento del 45% en ingresos durante 2023, apoyada en un canal directo con consumidoras leales. “Todo lo aprendido en los años de crisis ha servido para cimentar una base sólida”, reconoce.

¿Una figura más abierta que en el pasado?

Algunos críticos consideran que el documental no fue del todo revelador y que Victoria sigue siendo algo contenida al hablar de temas personales. Sin embargo, esa aparente distancia podría interpretarse también como una forma de control narrativo en un mundo donde las mujeres famosas son empujadas a desnudarse emocionalmente para ser aceptadas.

Beckham deja claro que “contar mi historia desde mi voz” fue esencial para ella en esta fase. “Por primera vez sentí que tenía suficiente seguridad en mí, suficiente historia empresarial, y que hablar del pasado no afectaría lo que con tanto esfuerzo he construido.”

Y lo cierto es que el documental logra algo raro: remover clichés, ofrecer inspiración para emprendedoras y transmitir un mensaje poderoso de autoaceptación.

Victoria fuera de los focos

En los minutos más íntimos del documental, Beckham habla de su padre como una influencia determinante en su mentalidad ambiciosa. También plantea cómo aprendió a encontrar balance con su familia actual y a blindarse ante la atención constante que genera.

“Valoro la vida que tengo, y aunque no siempre es fácil lidiar con lo que escriben de mi familia, aprendí que es parte de la exposición”, matiza.

Una historia feminista, sin etiquetas forzadas

Más allá del enfoque glamuroso o de los cameos de celebridades, el viaje de Victoria Beckham como emprendedora es también una historia profundamente feminista. Lo es porque habla de lucha contra estereotipos, de trabajo invisible, de errores empresariales reparados por una mujer que se negó a ser reducida a una imagen o una marca pasajera.

“No me avergüenza decir que soy muy ambiciosa”, sostiene en un momento del documental. Y esa ambición está desprovista de culpa, de la falsa modestia que se suele esperar de las mujeres visibles. Está cargada de propósito.

Victoria no intenta convencer a nadie. Ya no lo necesita. Su moda, su empresa y su trayectoria hablan por ella.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press