Lesiones, sanciones y regresos: una semana crítica en la NFL entre bajas sensibles y esperanzas renovadas

Los Detroit Lions, San Francisco 49ers y Washington Commanders enfrentan serios desafíos por lesiones clave, mientras que estrellas como George Kittle reavivan el optimismo de sus equipos

Una tormenta de lesiones sacude a los Lions

Los Detroit Lions afrontan un complicado escenario de cara al juego del lunes por la noche contra los Tampa Bay Buccaneers. La defensa secundaria del equipo ha sido diezmada por lesiones y sanciones. Los backs defensivos Kerby Joseph (rodilla), Terrion Arnold y Avonte Maddox (muslo) fueron oficialmente descartados. A esto se suma la suspensión de una fecha del safety Brian Branch, quien fue sancionado por lanzar un puñetazo tras el partido contra Kansas City.

La pérdida de estos jugadores complica la estrategia defensiva de Detroit. Joseph lidera al equipo en intercepciones esta temporada, mientras que Maddox aporta experiencia, y Arnold, novato de alto perfil, es clave en la profundidad del plantel. El cuerpo técnico deberá reinventar la secundaria con jugadores de profundidad, posiblemente recurriendo a esquemas defensivos más conservadores o híbridos.

Una oportunidad para Tampa Bay

Los Buccaneers, por su parte, podrían beneficiarse de este panorama si confirman el regreso de su receptor estelar Mike Evans, seis veces seleccionado al Pro Bowl. Evans ha estado fuera por tres partidos debido a una lesión en el tendón de la corva. También es posible la vuelta del novato Emeka Egbuka, quien salió lesionado en el partido anterior.

Los Bucs, sin embargo, tendrán que superar la ausencia de jugadores clave como el receptor Chris Godwin, el running back Bucky Irving y el liniero ofensivo Luke Haggard. Esta dinámica de lesiones y regresos convierte el duelo frente a Detroit en un verdadero ajedrez táctico.

George Kittle, la chispa que necesitaban los 49ers

George Kittle ha vuelto. El estelar tight end regresará el domingo por la noche para los San Francisco 49ers luego de perderse cinco partidos por una lesión en el tendón de la corva. Kittle, uno de los tight ends más completos de la NFL —dominante tanto bloqueando como recepcionando—, fue activado junto con el liniero defensivo Kevin Givens. Su regreso llega en un momento crítico: la ofensiva de los 49ers ha sufrido sin él.

Sin Kittle, San Francisco es el peor equipo de la NFL en promedio de yardas por acarreo (3.1), y casi el peor en yardas terrestres por partido (82.2). En el partido inaugural, antes de lesionarse, capturó 4 pases para 25 yardas y un touchdown. En la temporada pasada acumuló 1,106 yardas en 78 recepciones y 8 touchdowns. Su impacto va mucho más allá de los números, ya que mejora tanto la protección del mariscal de campo como las opciones terrestres con su bloqueo físico.

Además, los 49ers reestructuraron su plantel colocando en la reserva de lesionados al linebacker Fred Warner (operación de tobillo), mientras promovieron al receptor Malik Turner y al liniero Nick Zakelj desde el equipo de prácticas. La idea es reforzar ambos lados del balón para el enfrentamiento frente a los Atlanta Falcons.

Washington pierde a su tridente ofensivo

Los Washington Commanders también llegan a su próximo partido con profundas preocupaciones. Su principal receptor, Deebo Samuel, fue descartado por una lesión en el talón que venía arrastrando. Con 34 recepciones y 315 yardas, era el jugador más productivo del equipo. No solo eso: sus tres touchdowns lo tienen empatado como líder en anotaciones aéreas de la franquicia.

Para empeorar el panorama, Terry McLaurin —fuera ya por cuarta semana consecutiva— sigue recuperándose de una lesión en el cuádriceps. Tampoco estará presente Noah Brown, ahora oficialmente en la lista de lesionados tras una prolongada ausencia por lesión de rodilla e ingle. Esto deja al novato Jayden Daniels sin sus tres receptores principales.

En una nota más positiva para Washington, el equipo activó a su guardia derecho titular, Sam Cosmi, quien no había participado en la temporada tras desgarrarse un ligamento durante los playoffs. También activaron al esquinero Jonathan Jones, ausente desde la semana 2.

Una tendencia preocupante en la NFL

El escenario de lesiones en la NFL ha sido alarmante esta temporada. Según datos de Pro Football Reference, en las primeras 10 semanas de 2023, ya se habían producido más de 170 lesiones que implicaron la ausencia de al menos un partido para jugadores titulares, un 23% más que la temporada anterior para ese mismo período. Las lesiones de tendones de la corva, tobillos y cuádriceps han sido las más frecuentes.

Esta tendencia es preocupante, especialmente considerando que los equipos aún no han ingresado al tramo más físico de la campaña: diciembre y enero. Las bajas impactan directamente sobre la competitividad, el armado táctico y el espectáculo para los fanáticos.

Lo que está en juego esta semana

El partido entre los Lions y los Buccaneers puede significar un cambio de ritmo importante para ambos equipos. Detroit lidera su división pero no puede permitirse ceder demasiado terreno. Tampa, en cambio, busca mantenerse en la disputa por el comodín.

Los 49ers, posiblemente el equipo más talentoso del oeste, necesitan recuperar estabilidad tras varias semanas de bajo desempeño en ofensiva. El retorno de Kittle podría ser el catalizador perfecto para reactivar el ataque bajo el mando de Brock Purdy.

Finalmente, los Commanders, con un esquema ofensivo diezmado, apostarán a una estrategia conservadora y de posesión larga para reducir los errores y el desgaste. La presión recaerá sobre el novato Daniels y sobre el cuerpo técnico para diseñar un plan que permita competir ante Dallas Cowboys, uno de los mejores cuadros defensivos de la liga.

Apuestas, especulaciones y quebrantos

La NFL es, sin lugar a dudas, una liga de ajustes constantes. Los cuerpos médicos, entrenadores y GM deben reaccionar rápidamente a la marea de lesiones. El regreso de figuras como Kittle demuestra que el cuerpo técnico juega un papel tan crucial como los mariscales de campo. Pero también pone a prueba la profundidad del plantel. Los equipos mejor armados logran sobrevivir; los demás apenas resisten.

Los próximos juegos no solo decidirán partidos: definirán si estas franquicias están listas para el asedio físico e imprevisible del invierno NFL. Que comience la cuenta regresiva.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press