Los Vikings pierden el control: ¿Fue solo mala suerte o hay un problema estructural?

Errores en zona roja, entregas de balón y una defensa a medias hunden a Minnesota ante Philadelphia y prenden las alarmas rumbo al duelo contra Chargers

Los Minnesota Vikings están atravesando un periodo de turbulencia que va más allá de una derrota cerrada. La caída 28-22 ante los Philadelphia Eagles no solo profundiza sus altibajos en esta temporada, sino que evidencia una serie de problemas estructurales que podrían poner en jaque las aspiraciones del equipo en la NFC.

Un problema que se repite: fallos en situaciones críticas

Bajo el mandato de Kevin O'Connell, los Vikings han promovido una filosofía basada en lograr ventajas en los márgenes: eficacia en tercera oportunidad, zona roja y equipos especiales. El enfoque resultó útil durante su exitosa campaña de 2023, pero esa magia ha desaparecido en 2025.

Contra los Eagles, Minnesota sólo consiguió un touchdown en seis viajes a la zona roja. Esto representa una caída alarmante para un equipo que, hasta la Semana 6, se encontraba entre los 10 mejores en tasa de efectividad dentro de la yarda 20 rival.

"Tenemos los jugadores para anotar. Solo necesitamos terminar esas jugadas, especialmente en partidos cerrados como este", declaró el receptor estrella Justin Jefferson, quien sufrió un costoso drop en la zona de anotación defendida por Cooper DeJean.

La maldición de las entregas de balón

Los Vikings encadenan ya tres partidos consecutivos con dos pérdidas de balón y ninguna recuperación. Aunque lograron una idea milagrosa en Londres ante los Browns, O'Connell admitió que eso era un milagro: "No es una fórmula sostenible para ganar en la NFL", les dijo a sus jugadores tras ese triunfo.

El ejemplo más doloroso llegó en el segundo cuarto frente a Philadelphia, cuando la presión de Jalen Carter sobre Carson Wentz –iniciando en ausencia del lesionado JJ McCarthy– llevó a una intercepción devuelta para touchdown. Todo tras un error en la protección por parte del centro Blake Brandel.

Destellos defensivos: ¿una base sobre la cual reconstruir?

No todo fue negativo en la derrota. Por primera vez en la temporada, la defensa logró frenar efectivamente la carrera. Saquon Barkley, Jugador Ofensivo del Año de AP en 2024, fue limitado a sólo 44 yardas en 18 acarreos.

La clave estuvo en el regreso del linebacker Blake Cashman y el uso inteligente de Josh Metellus y Eric Wilson como apoyadores extra en la caja. Brian Flores, coordinador defensivo, optó por benchings estratégicos como el de Ivan Pace Jr. para priorizar solidez por tierra, sacrificando algo en lo profundo, donde los Eagles hicieron daño.

Una ofensiva que se derrumba en el momento más crítico

Desde 2023, los Vikings estaban entre los peores equipos en anotaciones en zona roja (28.º con 47%). En 2024 mejoraron ligeramente a 19.º con un 58%. Pero tras seis partidos en 2025, vuelven a bajar al 22.º lugar con 52%.

Errores individuales también pasan factura: desde el drop de Jefferson hasta una polémica decisión arbitral que anuló una recepción de touchdown de T.J. Hockenson. Para colmo, un holding dudoso de Brandel borró otro touchdown, esta vez a Jalen Nailor.

Las buenas noticias: Jordan Addison brilla

Uno de los pocos elementos positivos ha sido el ascenso de Jordan Addison, quien atrapó nueve pases para 128 yardas contra Philadelphia, alcanzando las 2,000 yardas en su carrera –logro que lo empata como el quinto más rápido en la historia de la franquicia.

A pesar de haber estado suspendido tres partidos al inicio de la campaña, Addison ha respondido con responsabilidad y ha demostrado química con ambos mariscales de campo.

Stock en caída libre: Brandel y el centro de la línea

Brandel fue celebrado tras su sólido debut ante los Browns. Pero su actuación frente a los Eagles fue desastrosa. Falló en momentos clave, permitió presiones, y cometió penalidades que borraron anotaciones. Esto subraya lo vulnerable que está la línea ofensiva tras las ausencias de Ryan Kelly y Michael Jurgens.

Lesiones: un problema que no deja de aparecer

El cuerpo médico de los Vikings ha tenido semanas agitadas. Aunque nombres como Cashman, Donovan Jackson y Brian O’Neill regresaron, otros como quarterback JJ McCarthy aún están en duda para el próximo jueves, por ser semana corta.

Además, Aaron Jones podría volver de lesión en la pierna, pero jugadores de rol como CJ Ham y Zavier Scott están tocados.

Una ironía dolorosa: el mejor partido ofensivo del año

Curiosamente, los Vikings acumularon su mayor total de yardas en la temporada: 387 yardas totales. En 2024, seis partidos superaron esa cifra, lo que muestra que la producción está… pero falta eficiencia.

Lo que viene: Chargers y luego Detroit

Con marca de 3-3, Minnesota enfrenta ahora un difícil viaje a la costa oeste para un partido de jueves por la noche contra unos Chargers en crisis, que perdieron tres de los últimos cuatro. El mini “bye week” posterior ofrece una ventana para ajustar antes de medirse a Detroit.

¿Crisis o simplemente un bache?

En una NFC muy disputada, los errores situacionales, las entregas de balón y la falta de punch ofensivo en la zona roja podrían costarle caro a los Vikings si no actúan con urgencia. La temporada está en un punto bisagra: o reaccionan ya, o el vagón del tren rumbo a postemporada se irá sin ellos.

Los próximos dos partidos definirán si este equipo tiene un techo de playoffs o si 2025 será recordado como una temporada perdida en los detalles.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press