Khris Middleton regresa a Milwaukee: una noche de emociones, recuerdos y renovadas aspiraciones

Milwaukee lo vio crecer, lo vio ganar, y ahora lo recibe como rival. La noche del regreso de Khris Middleton al Fiserv Forum no fue una más en el calendario de la NBA. Fue un capítulo cargado de nostalgia, emociones y respeto mutuo entre una ciudad y uno de los jugadores más emblemáticos de su historia reciente.

Un regreso que se siente como casa

El miércoles en la mañana, Khris Middleton despertó en Milwaukee, pero por primera vez en doce años no se iba a vestir con el uniforme de los Bucks. “No voy a mentir, se sintió raro”, confesó el escolta de 34 años durante la sesión de entrenamiento de los Washington Wizards.

No era la primera vez que enfrentaba a los Bucks como rival, pero sí era la primera vez en Milwaukee. La temporada pasada ya se habían cruzado en Washington, donde Middleton anotó 12 puntos y estuvo cerca de forzar la prórroga, fallando un triple en los instantes finales del encuentro que terminó 104–101 en favor de Milwaukee.

“Es diferente regresar aquí. Tener a los fans en casa, estar donde viví más de una década. Es más que jugar un partido, es regresar a un edificio que, en parte, ayudé a construir”, dijo Middleton con evidente emoción. Y tiene razón: si alguien dejó huella en la era moderna de la franquicia, ese fue él.

Ídolo de una generación

Middleton no solo fue parte integral de los Bucks: fue su corazón estratégico. En 12 temporadas en Milwaukee, promedió 17.1 puntos, 4.9 rebotes y 4.1 asistencias. Pero sus números solo cuentan parte de la historia. Middleton es el líder histórico de la franquicia en triples anotados (1,382), tercero en puntos (12,586) –solo detrás de Giannis Antetokounmpo y Kareem Abdul-Jabbar– y segundo en partidos jugados (735).

No por nada, su regreso estaba acompañado de un respetuoso tributo. Giannis Antetokounmpo, su compañero y amigo durante más de una década, no se quedó corto en elogios: “Debe recibir la bienvenida más cálida de todas. Cuando vea el video de homenaje, debería estar llorando antes del partido. Khris significa mucho para este equipo y para mí personalmente”.

En cuanto al cuerpo técnico, el nuevo entrenador Doc Rivers fue muy claro: pidió a la producción de los Bucks que realizaran un video espectacular para celebrar la carrera de Middleton con el equipo. “Es un Buck de por vida”, dijo Rivers. “Es un anotador increíble. Estoy seguro de que querrá demostrarnos lo que estamos perdiendo”.

Un viaje con altos y bajos

Middleton llegó a Milwaukee en 2013 desde los Pistons, en una transacción que pasó desapercibida al comienzo. Nadie imaginaba que ese joven alero se convertiría en uno de los pilares de una franquicia que venía de años de mediocridad.

Su evolución fue tan notoria que fue seleccionado tres veces al All-Star Game (2019, 2020 y 2022) e incluso fue clave en el campeonato de 2021, promediando 23.6 puntos, 7.6 rebotes y 5.1 asistencias durante la postemporada. Ayudó a darle a Milwaukee su primer anillo en 50 años, un logro que lo inmortalizó con letras doradas en la historia de la franquicia.

Pero no todo fue gloria. Las lesiones también marcaron sus últimos años como Buck. En la temporada 2022-23, solo jugó 33 partidos, y en la 2023-24 fueron apenas 55. Las cirugías en ambos tobillos y un esguince en el ligamento colateral medial lo hicieron perderse los playoffs de 2022, donde los Bucks cayeron ante Boston en una dolorosa serie a siete juegos.

“He caminado por estos pasillos miles de veces, he vivido cosas increíbles en esta cancha. Hoy me tomé un segundo para pensar en todo: los buenos momentos, los difíciles, todo”, compartió Middleton, nostálgico pero sereno.

Un nuevo comienzo en Washington

El traspaso que llevó a Middleton a los Washington Wizards fue parte de una movida estratégica de los Bucks, quienes recibieron a Kyle Kuzma a cambio. Además, los Wizards obtuvieron una primera ronda de 2024 y al joven prospecto AJ Johnson.

Middleton llega a una franquicia en reconstrucción, con menos presión y más espacio para liderar un nuevo proyecto. En sus propias palabras: “Mi cuerpo está en un gran lugar ahora. Tuve un gran verano. Empecé desde lo básico y fui construyendo. Sin cirugías, sin preocuparse por rehabilitaciones. Me siento bien”.

En una liga de tan alto nivel, la salud es mucho más que una ventaja física: es una garantía mental. Middleton buscará en esta nueva etapa demostrar que aún puede ser una pieza destacada, esta vez con la camiseta de los Wizards.

Valor intangible: lo que no se puede medir

La carrera de Middleton va más allá de números. Fue siempre un jugador silencioso, alejado del protagonismo mediático, pero indispensable en la cancha. Su química con Antetokounmpo era evidente, combinando el talento natural del griego con una inteligencia táctica y eficacia silenciosa que definían al escolta.

“Ese es mi hermano por siempre”, añadió Giannis. “Hemos hecho cosas increíbles juntos”.

En una era de constantes cambios, compromisos efímeros y jugadores que van y vienen, historias como la de Middleton y los Bucks se sienten más personales. Milwaukee lo adoptó, lo vio evolucionar y, a cambio, él entregó todo.

Esa relación sólida entre jugador y comunidad pocas veces se da en la NBA moderna, donde la lealtad suele tener valor de cambio. Middleton, sin decirlo, dejó un legado de constancia, esfuerzo e identidad.

¿Qué sigue para Milwaukee y para Khris?

Milwaukee comienza una nueva etapa liderada por el dúo Antetokounmpo–Lillard, y sin Middleton por primera vez en más de una década. En el banquillo, Doc Rivers inyecta una dosis de experiencia y disciplina a un equipo que quiere recuperar el trono de la Conferencia Este.

Para los Wizards, esta temporada representa un reinicio, y Middleton puede ser el mentor ideal para las nuevas generaciones. Después de todo, si alguien sabe sobre resiliencia y paciencia, es él.

Y aunque la camiseta cambió, el respeto no. Cuando Khris Middleton pisó el parqué del Fiserv Forum como rival por primera vez, los aplausos no se hicieron esperar. Era el reconocimiento a una trayectoria marcada por la fidelidad, el esfuerzo y la entrega.

Milwaukee recordará siempre a Middleton, y Middleton, por más camisetas que vista, siempre llevará a Milwaukee dentro.