El caos reina en la NFL: Giants en declive, Bears al alza y Broncos sobreviven a un thriller

La debacle de los Giants: errores, lesiones y la paciencia al límite

El mensaje fue claro y visible en el cielo de East Rutherford: una pancarta aérea sobrevolaba el estadio con la frase “Mr. Mara, enough is enough — clean house”. Una súplica desesperada de los fanáticos de los New York Giants, que tras la derrota 34-24 ante los San Francisco 49ers, cayeron a un desalentador récord de 2-7 en la temporada.

Brian Daboll, coach de los Giants, insiste en algo que simplemente no se ve en el campo: “fútbol complementario”. Pero lo del domingo fue todo menos eso. Los Giants fallaron en ofensiva, defensiva y equipos especiales. Y no por poco.

El novato Jaxson Dart, que mostró chispazos de talento al conectar un touchdown en la primera serie ofensiva, fue víctima de múltiples errores: pases caídos por Theo Johnson y Wan’Dale Robinson, y la incapacidad de su línea ofensiva para protegerlo. La defensa fue un desastre mayor: dejaron completamente solo a Christian McCaffrey en una de las jugadas más fáciles de su carrera.

La frustración en ascenso y los estragos de las lesiones

La seguidilla de derrotas ha puesto a los Giants en modo crisis. Ya no se trata de si podrán competir; la discusión gira en torno a cuándo se hará limpieza general en el staff técnico y la directiva. El propio Dart intentó mantener la compostura al declarar: “Tenemos que seguir creyendo que podemos ganar. No es divertido perder”.

A los errores se sumaron las lesiones: perdieron a su centro titular John Michael Schmitz, al linebacker Darius Muasau y al receptor novato Beaux Collins. Esto en una larga lista de jugadores clave ya fuera por lesión, como Malik Nabers y Cam Skattebo.

Ni siquiera el público fue de ayuda. El ambiente en MetLife Stadium era tan hostil que Dart comentó que parecía un partido fuera de casa. La afición de los 49ers dominó las gradas.

Cuando el talento marca la diferencia: la contundente actuación de Christian McCaffrey

McCaffrey y Brian Robinson Jr. fueron imparables. Rompieron tacleadas con facilidad, recorrieron yardas como si enfrentaran a un equipo colegial, y la defensa de los Giants simplemente no supo cómo detenerlos. El dominio terrestre fue absoluto. Los 49ers anotaron en su primera serie ofensiva y nunca soltaron el control del juego.

La actuación de McCaffrey nuevamente lo coloca como uno de los mejores corredores de la NFL en 2025. Fue una pesadilla para la defensiva de Nueva York, que ha permitido más de 33 puntos en tres juegos consecutivos.

Los Bears resucitan: Caleb Williams y una remontada para la historia

En el otro extremo del espectro, los Chicago Bears ofrecieron uno de los espectáculos más emocionantes de la jornada al vencer 47-42 a los Cincinnati Bengals, en un juego con tres anotaciones en los últimos dos minutos.

Caleb Williams demostró por qué fue tan esperado en el Draft 2025. No solo lanzó para 280 yardas y 3 touchdowns, sino que atrapó dos pases como receptor en jugadas de engaño. Según Sportradar, es el primer QB en 82 años que consigue múltiples recepciones en un juego.

La jugada definitoria llegó con 17 segundos por jugar. Un pase de 58 yardas a Colston Loveland, quien rompió dos tacleadas y entró a la zona de anotación, dio la victoria a Chicago tras un frenético intercambio de liderazgos.

Loveland finalizó con 6 recepciones para 118 yardas, mientras que el corredor Kyle Monangai corrió para 176 yardas en su primer partido como titular debido a la ausencia de D’Andre Swift. La ofensiva de los Bears acumuló 576 yardas, incluida una media de 7.6 por acarreo.

El receptor DJ Moore, por su parte, sumó 72 yardas por aire y lanzó un pase de anotación en una reversa que terminó en manos del propio Williams.

La tragedia defensiva de Cincinnati y el resurgir de Flacco

Los Bengals, liderados por el veterano Joe Flacco de 40 años, también vivieron una montaña rusa emocional. Flacco lanzó para 470 yardas y 4 touchdowns, pero incluso eso no fue suficiente para obtener la victoria.

El receptor Tee Higgins logró 121 yardas y 2 anotaciones, mientras que Ja’Marr Chase amasó 111 yardas. Sin embargo, permitir 7 anotaciones en 9 series ofensivas fue la sentencia para Cincinnati. Su récord cae a 3-6, con una defensa que ha permitido más de 30 puntos por tercer juego consecutivo.

Denver y su hábito de ganar feo: victoria con drama final ante los Texans

Finalmente, los Denver Broncos siguen acumulando victorias, aunque con suspenso. Vencieron 18-15 a los Houston Texans gracias a un gol de campo de Wil Lutz de 34 yardas cuando el reloj expiraba. Fue su sexta victoria consecutiva, y cuatro de esos partidos se ganaron viniendo desde atrás en el último cuarto.

Bo Nix no lució brillante (173 yardas, 2 TDs, 1 INT), pero apareció cuando más se necesitaba. Una corrida de 25 yardas suya fue clave para iniciar la última ofensiva que selló el partido.

La defensa de Denver, liderada por Jaylin Smith con una recuperación clave, supo resistir. Houston perdió a su mariscal de campo C.J. Stroud por conmoción y se estancó con Davis Mills, quien terminó con 137 yardas, 0 TDs y 0 conversiones en zona roja.

Apuntes históricos y lesiones importantes

• Marcedes Lewis, a sus 41 años, se convirtió en el ala cerrada más longevo en jugar un partido en la NFL. También es el jugador más veterano en vestir el uniforme de los Broncos.
• Denico Autry bloqueó su intento N°13 de gol de campo en su carrera, igualando a Julius Peppers como segundo máximo bloqueador desde 1991.

En cuanto a las lesiones:

• Los Giants vieron salir a tres titulares más, siendo su secundaria una de las más diezmadas de la liga.
• En Chicago, Cole Kmet y Josh Blackwell sufrieron conmociones y no volvieron al terreno.
• El CB Pat Surtain II de Denver se perderá varios juegos con una distensión en el pectoral.

¿Qué viene ahora?

Mientras los Giants visitan a los Bears la próxima semana con la moral en el subsuelo, los de Chicago buscarán extender la magia de Williams contra un rival en declive. Por su parte, Denver se enfrentará a Vegas el jueves en un duelo clave por los puestos altos en la AFC Oeste.

En una liga donde la paridad y el drama mandan, está claro: ni los errores ni la veteranía intimidan si hay talento en el campo. Pero también, como los Giants demuestran, ni siquiera el talento puede salvarte cuando todo el sistema colapsa.