Josh Allen vence a Mahomes con una actuación histórica y mantiene la hegemonía de Buffalo sobre Kansas City

Un duelo de titanes que no decepcionó

La rivalidad entre Josh Allen y Patrick Mahomes es una de las más electrizantes de la NFL moderna. Cada enfrentamiento entre Buffalo Bills y Kansas City Chiefs se convierte en evento obligatorio para aficionados del fútbol americano, y el duelo del domingo no fue la excepción. Allen lideró a su equipo a una victoria de 28-21 en Orchard Park, en un partido que no solo reafirma el dominio de los Bills en temporada regular sobre los Chiefs, sino que también inscribe al mariscal de campo de Buffalo en los libros de historia de la liga.

Josh Allen y su noche para el recuerdo

Allen brilló con luz propia: lanzó un pase de touchdown y corrió para otros dos, batiendo un récord histórico. Su anotación terrestre número 78 —sumando partidos de temporada regular y playoffs— superó al legendario Cam Newton como el mariscal de campo con más touchdowns por la vía terrestre en la historia de la NFL.

Además, con sus tres anotaciones totales, Allen llegó a 282 touchdowns combinados (pases y acarreos), colocándose en el segundo lugar all-time antes de los 30 años, por delante del mismísimo Mahomes (281) y solo por detrás de Peyton Manning (288).

“Estamos viendo el mejor momento de Josh Allen”, opinó el periodista deportivo Adam Schein en su programa Time to Schein. “Hay pocos jugadores en la historia del deporte con esas habilidades físicas y esa intensidad competitiva”.

Un Mahomes frustrado y vulnerable

Del otro lado del emparrillado, Patrick Mahomes lució más humano que de costumbre. Fue presionado de forma constante por la defensa de los Bills: terminó sin pases de anotación, con una marca de 15 completos en 34 intentos, y registró la peor tasa de efectividad en su carrera profesional con solo el 44% de pases completados.

La presión fue implacable: Mahomes recibió 3 capturas y 15 golpes por parte de la defensa de Buffalo, incluyendo una crucial serie final en la que lanzó tres pases incompletos consecutivos en los últimos 17 segundos del partido.

Una maldición inversa entre Bills y Chiefs

Con esta victoria, los Bills mejoran su récord a 6-2, consolidando una sólida campaña que busca romper con una historia reciente de decepciones en postemporada. Curiosamente, Buffalo ha ganado cinco enfrentamientos consecutivos en temporada regular contra Kansas City, pero tiene un registro de 0-4 en playoffs ante los Chiefs desde 2020.

“Claro que celebramos esta victoria, pero sabemos que el verdadero objetivo será cambiar esa racha en los playoffs”, declaró Allen al final del encuentro. Y no le falta razón: aunque cada triunfo es crucial, los fantasmas de las derrotas en postemporada aún persiguen al equipo del oeste de Nueva York.

James Cook, el arma secreta de Buffalo

Mientras Allen lideraba ofensivamente, James Cook ejecutaba con solidez desde el backfield. Con 114 yardas por tierra, el joven corredor aportó equilibrio al ataque y permitió a Buffalo manejar el reloj en los momentos clave. Fue su segunda actuación consecutiva con más de 100 yardas terrestres, lo que comienza a perfilarlo como una pieza crucial en la ofensiva de Ken Dorsey.

“James ha aprendido a leer espacios y castigar a las defensas con paciencia y explosividad”, explicó el comentarista Cris Collinsworth durante la transmisión en Sunday Night Football. “No solo es el futuro: ya es el presente de este equipo”.

Errores y ausencias: factores clave

El partido no estuvo exento de factores que afectaron el rendimiento de ambos equipos. Por parte de Kansas City, la ausencia del corredor titular Isiah Pacheco por una lesión en la rodilla mermó significativamente el juego terrestre. Además, el tackle derecho Jawaan Taylor se lesionó el tobillo en el tercer cuarto y no pudo regresar.

Por Buffalo, la baja de su cornerback Taron Johnson y la sorpresiva lesión de Michael Hoecht en el último cuarto levantaron alarmas de cara al exigente calendario que se avecina.

De hecho, el intento fallido de gol de campo de Matt Prater desde 52 yardas —que golpeó el poste derecho— casi le cuesta el partido a Buffalo. Mahomes inició la última serie desde su propia yarda 42 tras ese fallo, pero no logró concretar el milagro.

¿Qué sigue para ambos equipos?

La NFL no espera a nadie, y tanto Buffalo como Kansas City deben preparar duelos importantes antes del cierre de la primera mitad de la temporada. Los Chiefs tendrán una semana de descanso y luego enfrentarán a los Denver Broncos el 16 de noviembre como visitantes.

Los Bills, por su parte, viajarán al sur de la Florida para medirse con los Miami Dolphins, en un partido que definirá al líder de la AFC Este. Allen buscará aprovechar su buena racha y afianzar la posición de playoff antes del cierre del mes.

Contexto histórico del duelo Mahomes vs. Allen

Desde el año 2020, estos dos mariscales de campo han protagonizado algunos de los partidos más memorables de la liga, incluyendo aquel épico choque de postemporada en enero de 2022 que terminó 42-36 a favor de Kansas City en tiempo extra.

Sin embargo, en temporada regular, Allen ha sido amo y señor del duelo: con esta victoria, lidera la serie directa con 5 triunfos por solo uno de Mahomes. La diferencia está en los momentos clave: Mahomes ha eliminado dos veces a Buffalo en playoffs, incluyendo la final de conferencia de 2021.

¿Podría este triunfo ser el inicio de una redención en enero? Solo el tiempo lo dirá.

Un cambio de tendencia en la AFC

La conferencia americana se ha caracterizado por la hegemonía de los Chiefs en los últimos años. Sin embargo, combinaciones como este triunfo de los Bills, las inconsistencias en Baltimore y los altibajos de Cincinnati podrían abrir la puerta a un nuevo orden.

Con los Colts y Dolphins también mostrando atributos sólidos, la AFC parece más abierta que nunca. Y en el centro del huracán, está Josh Allen, con un brazo prodigioso, piernas imparables y ahora, un liderazgo maduro que busca trascender más allá de los números.

“Allen no solo está persiguiendo a Mahomes: está desafiando su legado”, escribió Kevin Clark en The Ringer. “Y si sigue jugando a este nivel, ese debate trascenderá cualquier comparación estadística”.

Un domingo que podría cambiar el rumbo de la temporada

No fue solo una victoria. Fue una declaración. Con este triunfo, los Bills envían un mensaje claro a la liga: están de vuelta, y Josh Allen está decidido a liderar más allá de la temporada regular.

Mahomes tendrá su revancha, sin duda. Pero por ahora, el trono de la AFC regular es propiedad de Buffalo. La batalla final —como ya es tradición entre estos dos gigantes— se librará en enero.