Epic Games vs Google: una batalla ganada por los desarrolladores (y tal vez por los usuarios)

El acuerdo entre Epic y Google podría cambiar radicalmente el futuro de Google Play y la distribución de apps para Android

Una guerra de cinco años llega a su fin

Desde 2020, Epic Games —conocida principalmente por el fenómeno global Fortnite— ha librado una férrea batalla legal contra los dos titanes del sector móvil: Apple y Google. Su cruzada: tumbar lo que consideraban prácticas monopólicas en las tiendas de aplicaciones principales de iOS y Android. Un conflicto que parecía eterno ha dado un giro inesperado con el reciente acuerdo entre Epic y Google, presentado en un tribunal federal de San Francisco en octubre de 2024.

¿Por qué es esto relevante? Porque por primera vez en años, un desarrollador de videojuegos tiene la posibilidad de transformar cómo interactuamos con las apps en nuestros dispositivos Android. Este artículo es un análisis del contenido, implicaciones y proyecciones futuras de este acuerdo judicial, el cual puede marcar el inicio de una nueva era en la distribución global de software móvil.

Antecedentes: ¿qué desató el conflicto?

Epic Games decidió lanzar una actualización de Fortnite que permitía a los usuarios pagar directamente a través de su plataforma, eludiendo las comisiones —de entre el 15% y 30%— que Google y Apple imponen en sus tiendas. Este hecho provocó que Fortnite fuera retirado de Google Play y App Store, y con ello, comenzó la guerra legal.

Epic argumentó que Google estaba ejecutando un monopolio ilegal dentro de Android, donde exigía que todos los pagos deban pasar por su sistema, penalizando económica y estratégicamente a los desarrolladores que intentaran evadirlo. La defensa de Google era que su ecosistema ofrecía más libertad que Apple, dado que los usuarios pueden instalar aplicaciones por sideloading (fuera del Play Store), pero los tribunales cuestionaron dicha libertad con evidencias de trabas técnicas y comerciales impuestas por Google.

El veredicto judicial de 2024: el principio del fin

En octubre de 2024, el juez James Donato falló a favor de Epic Games, ordenando a Google demoler sus "muros digitales": estructuras que limitaban activamente la competencia dentro del ecosistema Android. Uno de los puntos destacados de dicha sentencia era la obligación de Google a permitir tiendas de terceros como opción real y no disfrazada.

Este fallo fue ratificado por una corte de apelaciones en julio del mismo año, lo cual significaba que Google debía acatar estos cambios de forma inminente, sin posibilidad de dilación por apelaciones adicionales.

El acuerdo: Epic logra concesiones importantes

En el documento legal conjunto presentado recientemente, Epic y Google anunciaron un "acuerdo exhaustivo" aún sujeto a aprobación judicial, pero cuyos puntos principales ya dan luces claras del nivel de transformación que implicará. Entre ellos:

  • Comisiones reducidas: Google limitará las tarifas de compras dentro de la aplicación entre 9% y 20%, un descenso notable respecto al estándar anterior del 30%.
  • Distribución de tiendas de terceros: el Play Store deberá permitir y facilitar la instalación de tiendas alternativas, sin penalizaciones ni trabas técnicas.
  • Mayor transparencia en las políticas: Google se compromete a publicar claramente sus condiciones, para evitar prácticas oscuras o arbitrarias.

Tim Sweeney, CEO de Epic Games, celebró el acuerdo a través de sus redes como una "propuesta increíble" que promete un futuro más justo para los desarrolladores y usuarios de Android.

¿Qué significa para los usuarios?

La promesa es grande: más opciones de descarga, precios potencialmente más bajos y una menor dependencia del monopolio de Google. En teoría, esto abriría la puerta a tiendas como Epic Games Store para Android u otras ofertas especializadas, más competitivas y menos restrictivas.

Además, se evitaría para los usuarios el tener que recurrir a técnicas de sideloading inseguras para poder acceder a aplicaciones que no están en el Play Store debido a conflictos con Google.

¿Y para los desarrolladores?

Ellos son, posiblemente, los mayores beneficiados. Con comisiones más bajas y la posibilidad de lanzar sus propias tiendas, podrán enfocar más recursos en innovación y experiencia del usuario. Se estima que, tras este acuerdo, los desarrolladores podrían ahorrar entre 1.000 y 3.000 millones de dólares anualmente solo en tarifas más competitivas.

Según cifras de Sensor Tower, sólo en 2023 Google Play generó más de 47.900 millones de dólares en ingresos por compras dentro de aplicaciones. Cambiar la dinámica de estas ganancias podría alterar por completo el modelo de negocio de Google.

Un precedente para Apple y el resto del ecosistema

Aunque este acuerdo es específico con Google, las implicancias a nivel macro son gigantes. La Unión Europea ya ha presionado para que Apple permita tiendas externas con la Digital Markets Act, y este caso fortalece el argumento de reguladores y desarrolladores a nivel global.

Según algunos analistas de la industria tecnológica, este sería el primer paso hacia un nuevo estándar global donde las plataformas dominantes como Apple, Amazon o Meta deban permitir competencia real en sus ecosistemas cerrados.

¿Google se doblega o se adapta?

No sería justo decir que Google ha sucumbido sin luchar. La compañía ha enfrentado simultáneamente otros tres juicios antimonopolio solo en EE.UU. y múltiples señalamientos de prácticas nocivas tanto en su motor de búsqueda como en su publicidad digital. Este acuerdo representa más una adaptación estratégica que una derrota total.

Google podrá mantener su Play Store como opción principal, pero ahora tendrá que ofrecer competencia interna directa. Cómo gestione esta nueva realidad podría definir su próxima década.

La revolución silenciosa comenzó

Si bien no veremos cambios de la noche a la mañana, este acuerdo entre Epic y Google es posiblemente el mayor cambio estructural en el ecosistema Android desde su creación en 2008. Los usuarios, desarrolladores y analistas deben prestar mucha atención a cómo evoluciona este nuevo entorno.

La expectativa es que los consumidores puedan empezar a instalar tiendas de terceros legalmente verificada en los próximos 12 a 18 meses, lo que podría diversificar profundamente el acceso a contenido digital y sacudir modelos que parecían inamovibles.

Bienvenidos a la nueva era del Android libre.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press