Zohran Mamdani: una nueva era para Nueva York y el giro económico que desafía a Trump
Con una victoria histórica, el nuevo alcalde reclama una ciudad más asequible mientras las urnas lanzan un mensaje claro al trumpismo
Un terremoto electoral para Donald Trump
Las elecciones locales de 2025 en Estados Unidos dejaron un mensaje demoledor para Donald Trump: la preocupación por la economía ha superado el relato populista que le permitió regresar a la Casa Blanca un año antes. En lugar de consolidar su poder, ha recibido una llamada de atención de un electorado cada vez más agobiado por los altos costos de vida.
Demócratas como Abigail Spanberger en Virginia, Mikie Sherrill en Nueva Jersey y sobre todo Zohran Mamdani en Nueva York capitalizaron ese malestar. Casi todos los votantes en estos estados señalaron la economía —precios, empleo y vivienda— como su principal preocupación. El auge de estas campañas mostró que existe otro populismo, uno que no se basa en el miedo al inmigrante, sino en la promesa de un futuro más asequible para todos.
¿Quién es Zohran Mamdani?
A sus 34 años, Zohran Mamdani no solo se ha convertido en el alcalde más joven de Nueva York en más de un siglo. En un país marcado por los debates sobre raza, clase y religión, Mamdani es un símbolo de cambio: es el primer alcalde musulmán, de ascendencia sudasiática y nacido en África en ocupar el cargo en la metrópolis más poblada de EE.UU.
Hijo de académicos activistas y criado en una familia transnacional progresista, Mamdani emergió como figura política tras involucrarse en causas como la vivienda asequible y el transporte público gratuito. Su afiliación como democratic socialist no es superficial: sigue el camino ideológico de figuras como Bernie Sanders y Alexandria Ocasio-Cortez y representa una nueva generación que ha dejado atrás al centrista establishment demócrata.
Una campaña orientada a la asequibilidad
Las promesas de campaña de Mamdani fueron ambiciosas y explícitamente redistributivas. Entre los principales compromisos destacan:
- Transporte público gratuito en autobuses
- Guarderías sin costo para las familias trabajadoras
- Tiendas de comestibles públicas para competir con los altos precios del mercado
- Un nuevo Departamento de Seguridad Comunitaria para reemplazar ciertos roles policiales con trabajadores sociales y de salud mental
«Nos enfrentamos todos a los mismos problemas, sin importar nuestra ideología. El costo de vivir en Nueva York es inabordable», dijo Mamdani al día siguiente de su victoria.
Un electorado joven y movilizado
Los resultados de la encuesta AP Voter Poll revelaron que aproximadamente tres cuartas partes de los votantes menores de 30 años en Nueva York apoyaron a Mamdani. Aunque estos representan un sector minoritario del electorado, su implicación fue determinante. Más de la mitad de ellos estaban votando por primera vez en una elección municipal, lo cual marca un giro demográfico estratégico a largo plazo.
Asimismo, cerca del 40% de los votantes jóvenes en Nueva York se identificaron como socialistas democráticos. Este crecimiento refleja una tendencia más profunda en la política estadounidense: los votantes jóvenes están más abiertos a visiones radicalmente redistributivas, particularmente cuando enfrentan salarios estancados, alquileres inalcanzables y un futuro económico que les parece incierto.
Un país dividido entre Wall Street y Main Street
Mientras Trump presume del rendimiento de la bolsa y del repunte de algunos sectores tecnológicos, el resto de Estados Unidos vive una realidad muy distinta. El último informe de inflación muestra que los precios del supermercado aumentaron un 2,7% en el último año, y el conjunto del índice de precios al consumidor subió un 3%. La Reserva Federal, que se fija un objetivo del 2%, sigue considerando esta cifra demasiado alta.
«Miren sus 401(k)», fue la respuesta de Trump ante las preocupaciones por el costo de vida. Una afirmación que revela el desconexión entre los beneficios bursátiles y la vida diaria de millones de estadounidenses.
En Virginia, alrededor del 50% de los votantes nombraron la economía como su prioridad número uno. Gracias a ello, Abigail Spanberger se impuso con holgura en las elecciones a gobernadora. En Nueva Jersey, Mikie Sherrill ganó entre quienes destacaron el costo de vida como tema primordial. En Nueva York, Mamdani fue respaldado por dos tercios de quienes señalaron el costo de la vida como el mayor desafío local.
La reacción republicana (y del propio Trump)
Trump no hizo campaña activa antes del día de las elecciones. Y aunque intentó desmarcarse en redes sociales con un lapidario “NO ESTABA EN LA PAPELETA”, el mismo presidente reconoció: «No creo que haya sido bueno para los republicanos. Fue una noche interesante y aprendimos mucho».
Desde sectores aliados, como Vivek Ramaswamy—excandidato presidencial y actual aspirante a gobernador de Ohio—, se multiplican las voces para cambiar de enfoque: "Es momento de centrarse en la asequibilidad. Hay que hacer realidad el sueño americano reduciendo los costos de electricidad, alimentos, salud y vivienda."
De momento, Trump continúa adelante con su estrategia de mostrar éxito económico mediante eventos ostentosos: la semana pasada organizó una fiesta temática de la era del Jazz en Mar-a-Lago tras volver de una gira por Asia. Imágenes de lujo que contrastan con una población que cada vez más debe elegir entre pagar la renta o llenar la nevera.
Las apuestas de Mamdani para gobernar
Acabada la campaña, ahora llega la parte difícil para Zohran Mamdani: gobernar una ciudad que históricamente ha frustrado a los reformistas. Debe conformar su gabinete, definir políticas públicas y enfrentarse a una administración federal hostil. Donald Trump ya advirtió que podría cortar fondos a la ciudad o incluso tomar el control si Mamdani ganaba.
Además, Mamdani tendrá que navegar el escepticismo del gobernador estatal Kathy Hochul, quien se ha opuesto a aumentar impuestos a los ricos, medida clave para financiar los ambiciosos programas sociales del nuevo alcalde.
Pero Mamdani, firme, insiste en que su administración se basará en dos pilares: "excelencia y compromiso". Y aunque el camino estará plagado de obstáculos, ha dejado claro que no será un alcalde para mantener el status quo.
Más que una elección: una señal de cambio estructural
La victoria de Mamdani, combinada con el respaldo mayoritario a candidatos demócratas que priorizan la asequibilidad de la vida cotidiana, indica una inflexión política. La narrativa de Trump de un Estados Unidos en dorado renacer económico perdió resonancia frente a candidaturas cimentadas en la empatía con las penurias reales de la gente común.
Zohran Mamdani no es solo un nuevo alcalde. Es un portavoz de millones que ya no aceptan que el único crecimiento posible sea el del Dow Jones mientras las rentas en Brooklyn se disparan. Su victoria puede marcar un antes y un después no solo para Nueva York, sino para el futuro del progresismo en Estados Unidos. Y si logra cumplir aunque solo una parte de lo que promete, podría inspirar una nueva ola de liderazgos con la osadía de preguntar: ¿Por qué no?