“All Her Fault”: El thriller que destapa la sobrecarga invisible de las madres modernas

La serie protagonizada por Sarah Snook y Dakota Fanning expone, con tensión y crítica social, una maternidad que se tambalea entre la culpa, el abandono y las exigencias imposibles del mundo actual

¿Qué pasaría si un simple error con la niñera desencadenara una pesadilla? En una sociedad donde la perfección materna es la vara de medida y el equilibrio entre trabajo y familia se ha convertido en un acto de malabarismo constante, “All Her Fault” llega como un thriller psicológico que no solo engancha por su trama de suspenso, sino que pone el dedo en la llaga sobre la opresiva realidad cotidiana que muchas mujeres enfrentan.

Un drama de desaparición... y mucho más

La serie, basada en la novela homónima de la escritora irlandesa Andrea Mara, ha sido adaptada para el público estadounidense por Megan Gallagher, quien también es su creadora y guionista. “All Her Fault” cuenta la historia de Marissa Irvine, una madre exitosa que intenta conciliar su carrera en el mundo financiero con la crianza de su hijo Milo... hasta el día en que lo va a recoger de un playdate y descubre que nadie sabe quién es el niño, ni a qué casa fue llevado.

A partir de esa premisa angustiante se desarrollan ocho episodios que exploran no solo la intriga en torno a la desaparición del niño, sino las fisuras invisibles del matrimonio, la maternidad moderna y la presión silenciosa que se ejerce sobre las mujeres.

Un espejo incómodo de la maternidad actual

Según Gallagher, una de las motivaciones para crear esta serie tuvo raíz personal: “Yo casi termino hospitalizada por agotamiento tratando de hacerlo todo: trabajar, ser madre, llevar la casa”, confesó en una entrevista reciente. Esta vivencia se traduce en un guion lleno de verdades incómodas y diálogos que resuenan con muchas mujeres que intentan sostenerlo todo, a pesar de que el sistema no esté diseñado para apoyarlas.

Una de las frases más destacadas de la serie es pronunciada por el personaje de Dakota Fanning, quien interpreta a una amiga y aliada crucial en esta crisis: “Estoy cansada de ser asombrosa. Ya no quiero ser asombrosa.” Un grito desde el agotamiento de una generación atrapada entre la liberación profesional y una carga doméstica que no ha disminuido.

Sarah Snook, cruda y poderosa

Sarah Snook, reconocida por su papel en “Succession”, lleva el peso emocional del drama con una interpretación visceral y cargada de matices. Como Marissa, es tan meticulosa como vulnerable. Sabe exactamente qué ropa llevaba su hijo el día que desapareció, pero no puede recordar la última vez que respiró sin culpa. Su actuación es el corazón que hace latir esta serie con realismo y ansiedad.

“Es común que las mujeres sean las CEO del hogar mientras tienen trabajos de tiempo completo. Cuando eso no se cuestiona, ahí empiezan los verdaderos problemas”, afirma Gallagher. Y esa es una de las batallas centrales del show.

Thriller y crítica social: una fusión efectiva

La serie aprovecha el suspenso del secuestro para mostrar cómo las mujeres, incluso en relaciones de pareja estables, están solas en la gestión de la vida familiar. Los hombres, aunque bienintencionados, aparecen como espectadores pasivos. “Soy la madre predeterminada. Tú eres el reemplazo,” le dice Fanning a su esposo en uno de los diálogos más directos de la serie.

La narrativa también se ramifica hacia otras familias, como la del detective a cargo del caso —interpretado por Michael Peña—, o los suegros de Marissa, dando un espectro más amplio de cómo la culpa, el pasado no resuelto y el resentimiento modelan las relaciones familiares.

El dilema intergeneracional

Uno de los puntos más potentes que plantea “All Her Fault” es cómo las expectativas de las generaciones anteriores se han vuelto una trampa sin salida para las actuales. La creadora señala: “La generación de mi madre luchó por entrar al ámbito laboral, pero nunca se replanteó cómo salir del trabajo doméstico. Nosotras asumimos que podíamos con ambos… y ahora estamos ahogadas.”

Esta reflexión se convierte en el verdadero nervio expuesto de la serie: ¿cuán emancipadas están realmente las mujeres si siguen siendo las únicas responsables del ámbito doméstico?

¿Dónde están los padres?

La serie no criminaliza a los personajes masculinos, pero sí los ubica con una lupa crítica. Jake Lacy, quien interpreta al esposo de Marissa, es un ejemplo claro de este tipo de hombre que “no ve” porque todo ya está hecho cuando llega a casa. Se acentúa así una crítica social hacia la displicencia paternal; no como maldad, sino como falta de presencia real en el corazón logístico de la familia.

La serie pone en palabras y escenas algo que muchas mujeres sienten a diario: que sus parejas no saben cómo llegar al pediatra, qué talla usa su hijo o quién cuida del niño cuando ellas están enfermas.

Una amistad femenina que rompe moldes

Otro acierto de “All Her Fault” es su representación de la amistad femenina como un espacio de ayuda y no de competencia, como suele ocurrir en thrillers tradicionales. Dakota Fanning y Sarah Snook no compiten ni se traicionan; se apoyan, se salvan. “La presunción en estas historias es que las mujeres se van a enfrentar. Yo quería mostrar lo contrario”, explicó Snook en entrevistas.

El costo invisible de estar siempre disponibles

“All Her Fault” tiene el mérito de mostrar que no existe algo como “tiempo libre” para muchas madres. Mientras ellos juegan al baloncesto o van por una cerveza, ellas limpian, cocinan y hacen la lista del súper. La serie apunta a un equilibrio ficticio, socialmente sancionado, en donde la disponibilidad femenina es total. Pero tan invisible como imprescindible.

Un thriller con peso emocional

Las actuaciones sobresalientes, los giros narrativos bien medidos y las temáticas socialmente punzantes hacen de “All Her Fault” más que un simple entretenimiento. Es un espejo con filo, que evidencia cuán lejos estamos de una corresponsabilidad real en las familias modernas.

Este thriller no solo toca fibras emocionales por el drama del secuestro, sino que abre conversaciones urgentes: ¿Quién organiza la vida familiar? ¿Quién paga el costo emocional de sostenerla? ¿Y cuántas madres están al borde del colapso aunque sigan sonriendo en las reuniones escolares?

“All Her Fault” se puede ver en Peacock y promete no solo entretenerte, sino hacerte replantear la forma en que entendemos las responsabilidades familiares hoy en día. Un relato incómodo y necesario en una era de hashtags de empoderamiento y realidades aún desiguales.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press