Soledad masculina: cómo los grupos de apoyo están salvando vidas en la tercera edad

En Maine, clubes de hombres mayores ayudan a combatir el aislamiento y la depresión con café, carpintería y conversaciones que salvan

Un problema silencioso que se agrava con la edad

En Estados Unidos, y en particular en estados rurales como Maine, miles de hombres mayores enfrentan un enemigo silencioso: la soledad. Detrás de la aparente tranquilidad de una jubilación llega, en demasiados casos, la desconexión, la depresión y el riesgo de suicidio. Las cifras son elocuentes: según datos recopilados por The Maine Monitor, más hombres mayores murieron por suicidio con armas que en accidentes automovilísticos entre 2009 y 2023 en ese estado. A nivel nacional, los hombres blancos mayores tienen la tasa más alta de suicidio con arma de fuego de cualquier grupo demográfico.

Frente a este panorama sombrío, surgen historias de esperanza: grupos de hombres mayores que, lejos de sentirse inútiles o invisibles, han encontrado espacios para reconectar con otros, hablar sin filtros y sentirse útiles nuevamente.

El caso de Mark Miller y el Grupo de Hombres de Sacopee Valley

Mark Miller, ex maestro de primaria, experimentó de primera mano cómo el retiro puede generar una pérdida de identidad. “Fue muy útil tenerlos allí para escucharme, reflexionar y compartir sus experiencias”, comenta sobre sus compañeros del Grupo de Hombres de Sacopee Valley. Fundado en 2023, este espacio nació de la necesidad de dos hombres que buscaban contención para enfrentar la pérdida de memoria y el cuidado de una pareja enferma.

Lo que comenzó como un encuentro íntimo se transformó en una reunión semanal cada martes por la mañana en la ciudad de Porter, donde actualmente seis miembros —llegaron a ser doce— comparten sus vivencias, reflexionan sobre sus miedos y se apoyan mutuamente.

No se habla de política, no por evitar el conflicto, sino porque descubrieron que discutir sobre política era una forma de evitar los temas realmente personales. “Así que decidimos mantenernos en lo que nos incomoda, porque eso probablemente es lo más importante”, dijo Miller.

Bethel: carpintería, comunidad y propósito

En la ciudad de Bethel, otro grupo de hombres mayores toma un enfoque distinto: usar sus manos.

Los Congo Craftsmen, fundados hace dos décadas por Bob Iles, comenzaron como un grupo de desayuno de iglesia que aceptó hacer porta tarjetas para las bancas del templo. Luego, el proyecto creció exponencialmente.

Hoy han completado más de 150 proyectos para organizaciones comunitarias locales. Desde bibliotecas móviles hasta candelabros de madera, su trabajo tiene un propósito claro: ayudar a la comunidad y mantenerse activos. “Es el proyecto y el sentido de logro lo que hace que los miembros sigan viniendo”, afirma Iles, quien con 91 años es el integrante más longevo.

Los lunes por la mañana se dedican a trabajar. Después, disfrutan de un café y una charla distendida. Aunque muchos fueron profesionales exitosos, ahora encuentran en esta rutina semanal una razón para levantarse, compartir risas y colaborar.

ROMEO: almuerzos, charlas y nuevos lazos

En Harpswell, la iniciativa ROMEO (Retired Older Men Eating Out) se propuso ofrecer a los hombres mayores una comida gratis y una actividad para fomentar la conexión social. Detrás de este nombre simpático hay una misión de salud pública. “Los hombres mayores mueren antes, muchas veces porque están aislados”, explica Tom Mahoney, coordinador del programa.

ROMEO nació luego de que voluntarios notaran que muchos ancianos vivían solos y mal comían. Con una subvención de $8,000 de parte de la Maine Council on Aging, organizaron un primer evento en agosto de 2024: un asado con autos antiguos. Aunque solo asistieron 10 hombres, superados en número por organizadores y esposas de otros asistentes, esa semilla germinó.

Hoy ROMEO atrae hasta 57 participantes por evento, con actividades tan variadas como conciertos de cuartetos, charlas de ex entrenadores de béisbol, o presentaciones antiestafa por la Oficina del Sheriff. En uno de los eventos, hombres con demencia cantaron a viva voz con una sonrisa. “La nieta de uno de ellos me dijo que no dejó de hablar del concierto toda la noche”, cuenta Mahoney.

Maine y la epidemia de la soledad

Estos grupos responden a una necesidad creciente. En 2023, una encuesta del University of Michigan National Poll on Healthy Aging reveló que:

  • Un tercio de los adultos mayores tenía contacto escaso con personas fuera de su hogar.
  • Más de un tercio se sentía solo o sin compañía.

La anteriormente nombrada epidemia silenciosa fue formalmente reconocida por el ex Cirujano General de EE. UU., Vivek Murthy, quien aseveró que la soledad tiene efectos en la salud equivalentes a fumar 15 cigarrillos por día.

Un futuro comunitario para la tercera edad

Estos hombres no están esperando caridad o compasión. Están construyendo mejor salud mental desde la empatía, el diálogo y actividades concretas. Están reformulando lo que significa envejecer.

Miller lo resume bien: “Todo lo que estás atravesando, otro ya lo vivió o lo está viviendo ahora. Y compartir ese dolor ayuda a aliviarlo”.

En una cultura donde envejecer equivale muchas veces a desaparecer, estos espacios son también una afirmación simbólica: “Sigo aquí, soy parte de esta comunidad y tengo algo que aportar”.

Para más información sobre programas de envejecimiento activo en Maine, visita el sitio de la Maine Council on Aging.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press