EEUU: Cañones y un láser para alejar a gansos de agua tóxica
Dos empresas diseñan un plan con cañones, radares y láseres para alejar a los gansos de una fosa tóxica
Después de que miles de gansos blancos murieran el otoño pasado en el agua tóxica de una antigua mina a cielo abierto en Montana, las empresas responsables de la fosa han recurrido a las armas. Literalmente.
Montana Resources y Atlantic Richfield Co., propiedad de BP, han propuesto emplear cuatro cañones de propano sobre trípodes que se accionarían con sensores de movimiento de largo alance, como una medida adicional para ahuyentar a los pájaros de la fosa Berkeley durante la migración de primavera.
El plan también baraja el uso de radares, drones aéreos y acuáticos y láseres situados de forma estratégica para crear una "red" en torno a la fosa e impedir que las aves se posen en el agua contaminada con metales.
Las empresas quieren probar esas y otras tecnologías durante la temporada primaveral de migraciones, que comenzó el miércoles, para evitar muertes masivas como las ocurridas en noviembre. Entonces murieron de 3.000 a 4.000 gansos blancos, también conocidos como ánsares nivales, después de que una ventisca los forzara a refugiarse en la balsa de agua contaminada. La tecnología instalada entonces no bastó para mantenerlos alejados.
El borrador del plan se envió el mes pasado a las autoridades medioambientales y de vida salvaje federales, que deben aprobarlo. Si las medidas tienen éxito, las empresas tienen previsto incorporar toda o parte de la nueva tecnología en su programa permanente para mantener las aves alejadas de la fosa Berkeley.
La mina de cobre a cielo abierto suspendió sus operaciones en la década de 1980 y ahora está llena con 189.000 millones de litros (50.000 millones de galones) de agua tóxica extraída de los miles de túneles subterráneos bajo Butte, otrora líder mundial en la minería de cobre. Ahora forma parte del complejo más grande incluido en el programa federal Superfund para limpiar zonas contaminadas.
Montana Resources, que opera otra mina de cobre a cielo abierto contigua, inició el programa para ahuyentar a las aves de la fosa en 1995, cuando 342 gansos blancos murieron tras posarse en el agua. La compañía recibió una multa de 30.000 dólares por ese incidente. La investigación sobre el suceso del pasado otoño sigue abierta y no se ha determinado si la empresa será sancionada, indicó el portavoz de la agencia estadounidense de Pesca y Vida Salvaje Ryan Moehring.