Galván y Martínez se reivindican con oros para México en atletismo de Centroamericanos
SAN SALVADOR (AP) — Hace tres días, Laura Galván lideraba los 5.000 metros, la prueba en la que era favorita y de la que ha sido campeona panamericana. De algún modo que ni ella se explica, permitió que una rival que debía estar fatigada unas horas después de ganar el medio maratón, la rebasara en la recta final y le arrebatara el oro
Peor le fue a su compatriota mexicano Fernando Martínez. Abrigaba esperanzas de oro en la misma distancia y en el mismo día, pero los calambres y la humedad le impidieron concluir siquiera.
Ambos consiguieron un buen consuelo el jueves, con sendos oros en los Juegos Centroamericanos.
Galván no estuvo dispuesta a que la experiencia de quedarse con la plata se repitiera en los 10.000, pese a que ésta no es su prueba principal. Siguió acelerando hasta dejar atrás a sus adversarias, conseguir el oro e imponer un récord de las justas.
“Definitivamente creo que el hecho de no dar por seguro esta vez que iba a ganar me mantuvo alerta, al mismo tiempo un poco presionada de repente, pero después intentaba relajarme un poco”, contó Galván, con un gesto muy distinto. “Pero definitivamente no es nada fácil”.
Paró el cronómetro en 33 minutos, 12,28 segundos, para quebrar el registro de 33:41,48, impuesto por su compatriota Patricia Sánchez en Barranquilla 2018.
El lunes, la mediofondista de 30 años tomó la delantera desde el comienzo y se perfilaba como ganadora en el estadio Jorge “Mágico” González. Antes de llegar a la última curva, la venezolana Joselyn Brea aceleró y terminó superando claramente a Galván.
Brea lo consiguió un día después de obtener el oro en el medio maratón, con la fatiga que ello suponía. Por lo visto es de acero, porque en la misma velada que deparó los triunfos de Galván y Martínez se impuso en los 1.500 metros para obtener su tercer oro.
Galván decidió cerrar esta vez el margen para cualquier sorpresa. Lideró de nuevo desde el inicio pero, al mediar la carrera, se vio rebasada por unos 20 metros por Viviana Aroche, quien como el resto de los guatemaltecos compite bajo la bandera de Centro Caribe Sports.
La situación no duró mucho. La deportista de La Sauceda, pequeño pueblo del estado de Guanajuato, apretó el paso. Cuando sonó la campana indicando que faltaba una sola vuelta, no había duda alguna de quién ganaría.
Aroche, de 25 años, originaria de Morazán y quien recién en abril había establecido un récord nacional y centroamericano en esta distancia en el Bryan Clay Invitational, subió al segundo peldaño del podio.
El bronce fue para la cubana Anisleidis Ochoa, con 34:13,61.
Martínez ni siquiera había tenido una plata para resignarse. Venía a borrar una experiencia absolutamente amarga y lo logró.
Se llevó la presea dorada con 3:43,47 minutos, seguido por el boricua Robert Napolitano, quien obtuvo la plata, y por Doge Minors, de Bermudas, quien recibió el bronce.
También monarca panamericano en 2019, Martínez refrendó el oro de los 1.500 obtenido en Barranquilla hace cinco años.
“Me da gusto haber revalidado el título, pero lo que me alegra más es haber demostrado que lo del otro día fue una de esas cosas que pasan en el atletismo”, comentó el atleta del estado norteño de Durango. “Y después de ver lo de Laura, creo que hoy sí fue una noche de revancha para los mexicanos. El deporte te da revanchas”.