Países del río Mekong discuten proyectos de represas
PHNOM PENH, Camboya (AP) Líderes de los países a lo largo del río Mekong en el sudeste asiático se reunieron en miércoles en la capital de Camboya en medio de gestiones de China para construir más represas que están alterando el flujo de aguas y amenazando el ambiente.
La reunión fue presidida por el primer ministro camboyano Hun Sen y homólogo chino Li Keqiang, a quienes se unieron los líderes de Tailandia, Laos, Vietnam y Myanmar.
Los líderes acordaron en una declaración conjunta mejorar la conectividad entre sus países para acelerar la industrialización, la urbanización, el comercio y la integración financiera. Llamaron además a una mayor cooperación en el manejo y utilización de los recursos hidráulicos.
El objetivo declarado del foro de Cooperación Mekong-Lancang, creado por China en el 2015, es promover el desarrollo sostenible y mejorar la calidad de vida para los millones de personas que viven en la subregión del Mekong.
Conocido como Lancang en China, el Mekong es vital para el sudeste de Asia, donde más de 60 millones de personas dependen del río y sus afluentes para comida, agua y transporte.
El doceavo río más grande del mundo recorre casi 5.000 kilómetros (3.100 millas) desde la Planicie Tibetana y atraviesa el sudeste asiático, antes de desembocar en el Mar del Sur de China en Vietnam. La cuenca del río es hábitat de hasta 1.700 especies de peces, lo que le hace la más diversa después de las cuencas del Amazonas y el Congo.
Pero el río es además una fuente potencial de tensiones regionales debido al número de proyectos de hidroeléctricas que están alterando su curso y generando temores de daños ecológicos. Vietnam, ya en conflicto con Beijing sobre territorio en el Mar del Sur de China, dice que corre riesgo especial de efectos dañinos.
China es la propulsora de muchos de los proyectos, habiendo construido ocho represas en el río desde los años de 1990, y actualmente construye o planea más de una decena. La mayoría de las represas planeadas río abajo estarían en Laos.
Beijing además quiere que partes del río sean drenadas o que se despejen rápido para facilitar la navegación de grandes buques de carga. Los ambientalistas advierten que eso tendría consecuencias catastróficas para el ecosistema.
