El fenómeno de ‘KPop Demon Hunters’: cuando el K-pop conquista Netflix y el corazón de los fans

Una mezcla de animación vibrante, música pegajosa y homenaje auténtico a la cultura coreana convierte a esta película en la sorpresa cinematográfica del año

Una explosión de colores, música y demonios

Netflix lo ha vuelto a hacer. Pero esta vez, no con una superproducción estadounidense o una serie de crimen escandinava. En 2024, la verdadera sorpresa ha venido de Corea del Sur, con KPop Demon Hunters, un musical animado que combina el mundo de las estrellas del K-pop con una batalla épica contra demonios.

El filme ha capturado la atención global al punto de encabezar las listas de Netflix en múltiples países. Pero no solo eso: su banda sonora ha debutado en el número 1 del Billboard Soundtracks Chart y ha alcanzado el puesto número 8 en el codiciado Billboard 200. Ocho de sus canciones han entrado en el Billboard Hot 100. Sí, es un fenómeno, y vamos a analizar por qué.

¿Un musical? ¿Una cinta de acción sobrenatural? Es ambos — y más

KPop Demon Hunters sigue la historia del grupo ficticio de chicas HUNTR/X, una girl band con talento para la música... y para aniquilar demonios. Esta inesperada premisa ha resultado ser un golpe de frescura dentro de una industria cinematográfica habitualmente dominada por secuelas y remakes.

“No es completamente coreana, no es completamente occidental; está justo en medio”, explicó Maggie Kang, una de las directoras del filme. Y tiene razón. La cinta ofrece una fusión intercultural que evita la sobreexplicación de sus elementos coreanos en favor de una inmersión completa en su universo vibrante.

La música: una carta de amor al K-pop… hecha con respeto

Uno de los grandes aciertos de la película ha sido su soundtrack. La producción trabajó estrechamente con The Black Label, una discográfica surcoreana cofundada por el productor Teddy Park, legendario por su trabajo con BLACKPINK, 2NE1 e incluso BigBang.

“Hicieron la tarea”, resumió Jeff Benjamin, periodista musical especializado en K-pop. Y eso se nota. No es solo que las canciones sean buenas; es que son auténticas. Tanto así que incluso el tema del boy band ficticio “Saja Boys”, titulado “Soda Pop”, rinde homenaje directo a los íconos noventeros de la escena surcoreana como H.O.T.

Según Benjamin, lo que diferencia a KPop Demon Hunters es que “recupera el arte de la banda sonora original”, lo cual escasea en una industria dominada por playlists genéricas.

K-pop: el corazón emocional del filme

La autenticidad no solo está en la música. Como diría la periodista de K-pop Tamar Herman, la película es más una “celebración del K-pop” que una historia que simplemente usa figuras coreanas como decoración.

“Tiene guiños internos para los verdaderos fans, como lo hacen algunas películas infantiles que incluyen bromas para los padres”, señaló Herman.

Desde el diseño de los lightsticks hasta las coreografías estilizadas o las referencias a clínicas medicinales coreanas, cada elemento respeta las raíces culturales. Y lejos de occidentalizarlo todo para “facilitar el mensaje”, los directores optaron por sumergir al público en la experiencia coreana.

Visualmente impactante: animación que da vida al K-pop

Visualmente, KPop Demon Hunters ha sido descrito como una mezcla entre lo tradicional y lo moderno. El diseño de personajes y las secuencias de acción recuerdan a lo mejor de los animes coreanos y escenas como las de Spider-Man: Into The Spider-Verse.

“Quisimos que los demonios y los Jeoseung Saja —la figura mitológica coreana similar a la parca— coexistieran en un estilo visual moderno”, explicó Kang. “Queríamos recrear eso típico de los K-dramas, pero en animación”.

Esto ha inspirado a creativos de todo el mundo. Desde la fanart mexicana Nanci Alcántar hasta la ilustradora estadounidense Zabrinah Santiago, muchos artistas han respondido con ilustraciones, coreografías y cosplay. Tan solo en Instagram, el hashtag #KPopDemonHunters tiene miles de aportes de fans.

Fandom: el verdadero héroe de esta película

Como bien lo señaló Maggie Kang, “el fandom juega un papel vital en salvar al mundo al final de la película”. Y eso se refleja en la recepción del público. Los fans no solo han aceptado la película; la han adoptado como suya.

Una de las grandes preocupaciones iniciales era que Hollywood, como ya lo ha hecho en el pasado, explotara la estética y popularidad del K-pop sin comprenderla. Pero esta vez, el resultado ha sido lo contrario: una producción meticulosa, comprometida y profundamente respetuosa.

“Esto se siente como una carta de amor, y no un producto comercial diseñado para capturar al fandom”, comentó Santiago.

Comparaciones inevitables: ¿una nueva ‘Encanto’ cultural?

Los paralelismos con Encanto de Disney son inevitables. Ambas películas utilizan el formato musical para rendir homenaje auténtico a una cultura, involucran a la familia, la tradición y la magia de forma intensa, y ambas han generado fenómenos virales. “No se habla de Bruno” fue una locura global, y ahora HUNTR/X podría ser el nuevo fenómeno de TikTok.

Además, su impacto comercial ya es comparable: más allá del éxito en Netflix, KPop Demon Hunters ha logrado lo que pocos musicales animados consiguen: entrar al mainstream por mérito propio, sin depender de franquicias establecidas.

Una historia inédita que conquista por su originalidad

En un mercado saturado de secuelas y adaptaciones, KPop Demon Hunters resalta precisamente por su originalidad. La trama no está basada en un cómic, novela o videojuego. Es una idea fresca concebida como híbrido cultural y artístico que entrega acción, música y corazón.

“No queríamos explicar nada, solo queríamos que todos aceptaran que estaban en Corea”, declaró Maggie Kang una y otra vez. Ese enfoque inmersivo ha ayudado a que espectadores de diversas culturas conecten con la historia.

Y tal vez ahí radique la clave del éxito. No se trata solo de lo brillante de su animación, ni de lo elaborada de su música, ni siquiera de la moda o los efectos especiales. Se trata de respeto: respeto por una cultura, por sus fans, y por la música como forma narrativa.

Bienvenidos al futuro del cine musical animado. Se llama KPop Demon Hunters y tiene una katana, un beat impecable, y un fandom dispuesto a salvar el mundo.

Este artículo fue redactado con información de Associated Press