Silvia Venturini Fendi se despide del mando creativo de Fendi y deja un legado eterno en la moda
Tras más de dos décadas liderando la marca familiar, Venturini cierra una era dorada y asume un nuevo rol como presidenta honoraria de la emblemática casa de moda italiana
Silvia Venturini Fendi: una heredera del arte y la elegancia
Hablar de Fendi es hablar de Roma, de una tradición artesanal centenaria, y, sobre todo, de la dedicación inquebrantable de una familia —la familia Fendi— que ha perpetuado la excelencia en el diseño de moda generación tras generación. En el corazón de esa historia se encuentra Silvia Venturini Fendi, quien acaba de anunciar que dejará su rol al frente de la dirección creativa de la firma para asumir un cargo como presidenta honoraria, cerrando así un capítulo trascendental en la evolución de la marca.
Venturini, que asumió en los últimos años la responsabilidad de dirigir las líneas masculina, femenina y de accesorios, se despide con una colección primavera-verano 2026 que encapsula el espíritu de la maison con un enfoque audaz y fantástico. Su renuncia al control creativo no significa, sin embargo, una despedida total: su nuevo cargo refleja el respeto y la relevancia que mantiene dentro del universo Fendi.
De los orígenes familiares al siglo XXI: una historia de mujeres y legado
Fundada en 1925 por Adele y Edoardo Fendi, la casa Fendi comenzó como una pequeña tienda de cuero y peletería en Roma. Pero fueron las cinco hijas de Adele —entre ellas Anna Fendi, madre de Silvia— quienes transformaron la boutique en un emblema internacional de lujo. Silvia representa la tercera generación, y su papel ha sido esencial para mantener vigente el ADN de la marca en un mundo donde lo efímero muchas veces reemplaza lo auténtico.
“Estas han sido verdaderamente unos años emocionantes, un viaje que también recorrí en nombre de mi abuela Adele, de mi madre Anna y de sus hermanas”, declaró Venturini en su despedida, con palabras que tocan lo profundo de la identidad familiar y del compromiso con la herencia italiana.
El hilo invisible entre Karl Lagerfeld, Kim Jones y Silvia
La historia reciente de Fendi no puede contarse sin los nombres de Karl Lagerfeld y Kim Jones. Lagerfeld estuvo en la casa por más de 50 años, formando con Silvia una mancuerna legendaria. Tras su fallecimiento, Kim Jones asumió la dirección creativa de la línea femenina en 2020, dejando a Venturini a cargo de las colecciones masculinas y los accesorios. Desde octubre de 2024, con la salida de Jones, Silvia tomó las riendas completas durante el año del centenario de Fendi.
“Qué viaje maravilloso ha sido, no solo creativamente sino también desde la perspectiva humana”, expresó Silvia, reflexionando sobre los vínculos que forjaron la casa no sólo en diseño, sino en humanidad y valores compartidos.
Una colección final con fantasía e innovación
Como broche de oro a su paso por la dirección creativa, Silvia presentó durante la más reciente Semana de la Moda de Milán su última colección para Fendi: un adelanto primavera-verano 2026 que emocionó al mundo de la moda. Con un carácter co-ed y un enfoque lúdico que abordó lo artesanal desde un enfoque futurista, la colección estuvo plagada de texturas, transparencias y siluetas escultóricas que sintetizan su visión creativa.
“Su visión ha guiado a Fendi desde sus raíces artesanales romanas hacia el futuro”, dijo Ramon Ros, actual presidente y CEO de Fendi, al momento del anuncio. Un reconocimiento a una carrera que ha mantenido la esencia de la tradición, sin dejar de evangelizar la innovación.
El papel de Venturini en la consolidación de los íconos de Fendi
Pocos saben que detrás del fenómeno de la Baguette de Fendi —uno de los bolsos más emblemáticos de la moda contemporánea— estaba precisamente Silvia Venturini Fendi. Lanzado en 1997, este diseño desafió las convenciones y transformó los accesorios en protagonistas absolutos del armario femenino. Desde entonces, nuevas versiones, materiales y colaboraciones han mantenido vigente esta pieza como símbolo de estatus y sofisticación.
Además de la Baguette, también está la Peekaboo, otro bolso icónico con el sello de Silvia, que representa una mezcla perfecta entre ironía, lujo y funcionalidad.
Fendi bajo LVMH: lujo con visión global
Desde que LVMH adquirió una participación mayoritaria en Fendi en 2001, la marca ha ampliado su presencia internacional sin abandonar sus raíces artesanales. Silvia supo navegar esta era de expansión con sutileza, garantizando que el alma romana de Fendi —sus talleres, su savoir-faire y su enfoque en el detalle— no se diluyera en el anonimato de la globalización.
Gracias a su influencia, Fendi sigue siendo una referencia en peletería de lujo, pero también en innovación material, sustentabilidad y colaboración artística. Desde exposiciones con artistas hasta desfiles en lugares históricos como el Coliseo o las Termas de Caracalla, Venturini convirtió cada presentación en una declaración conceptual.
¿Quién llevará ahora la batuta creativa de Fendi?
Con la salida de Silvia del ámbito creativo directo, las especulaciones sobre quién tomará ahora el timón se disparan. La casa aún no ha anunciado oficialmente un sucesor o sucesora, pero los rumores en la industria apuntan a posibles figuras consagradas o incluso a diseñadores emergentes que entiendan profundamente el valor patrimonial de la marca.
Lo cierto es que, quien asuma el liderazgo, lo hará con una tarea enorme: estar a la altura de un legado construido sobre la excelencia, la familia y la artesanía.
Silvia Venturini Fendi: presidenta honoraria y guardiana de un legado
El nuevo cargo de presidenta honoraria no es meramente simbólico. Representa el papel de Silvia como guardián del espíritu Fendi, asegurando que la visión original de la maison continúe resonando en cada decisión estética, estratégica y conceptual.
“Voy a seguir apoyando el legado de nuestra marca, algo que considero no solo mi responsabilidad, sino también mi pasión”, afirmó Silvia, dejando claro que, aunque cede la dirección creativa, su corazón seguirá latiendo al ritmo de Fendi.
Una figura insustituible en la moda
Dentro de una industria donde los imperios creativos pueden cambiar de manos fácilmente, la trayectoria de Silvia Venturini Fendi se mantiene como un ejemplo de autenticidad, coherencia y visión. Más que diseñadora, ha sido embajadora cultural, amiga del arte y voz activa en debates sobre la sustentabilidad y la continuidad artesanal.
Hoy, a sus 64 años, cierra un capítulo con la dignidad de quien sabe que ha dejado una huella imborrable no solo en la firma que lleva su apellido, sino en la historia misma de la moda contemporánea.
¡Gracias, Silvia! Por enseñarnos que la moda no solo viste cuerpos, sino también historias, memorias y visiones del mundo.